Frans Timmermans, vicepresidente ejecutivo para el Pacto Verde Europeo, ha declarado: "Para alcanzar nuestros objetivos climáticos, las emisiones procedentes del sector del transporte deben seguir presentando una clara tendencia a la baja. La estrategia de hoy transformará la forma en que las personas y las mercancías se desplazan a través de Europa, y facilitará que se combinen distintos modos de transporte en un mismo viaje. Hemos fijado unos objetivos ambiciosos para todo el sistema de transporte a fin de que la recuperación de la crisis provocada por la Covid-19 sea sostenible, inteligente y resiliente".
Adina Vălean, comisaria de Transportes, ha añadido: "Las tecnologías digitales tienen capacidad para revolucionar nuestra forma de desplazarnos, haciendo que nuestra movilidad sea más inteligente, más eficaz y también más ecológica. Debemos proporcionar a las empresas un marco estable para las inversiones ecológicas que tendrán que realizar durante las próximas décadas. A través de la ejecución de esta estrategia, crearemos un sistema de transporte más eficiente y resiliente, que esté asentado sobre una vía firme para reducir las emisiones en consonancia con los objetivos del Pacto Verde Europeo".
Visión a diez, quince y treinta años
El sistema de transporte europeo mantendrá el rumbo hacia un futuro inteligente y sostenible gracias a unos hitos concretos:
En 2030
• Se espera que al menos 30 millones de automóviles de cero emisiones circularán por las carreteras europeas;
• Cien ciudades europeas serán climáticamente neutras;
• El tráfico ferroviario de alta velocidad se habrá duplicado en toda Europa;
• Los viajes colectivos planificados para trayectos inferiores a 500 km deberán ser neutros en emisiones de carbono;
• Despliegue a gran escala de la movilidad automatizada;
• Habrá buques de emisión cero listos para su comercialización.
En 2035
• Habrá aeronaves de gran tamaño de emisión cero listas para su comercialización.
En 2050
• Prácticamente todos los automóviles, furgonetas, autobuses y vehículos pesados nuevos serán de cero emisiones;
• El tráfico de mercancías por ferrocarril se habrá duplicado;
• Una red transeuropea de transporte (RTE-T) multimodal totalmente operativa proporcionará conectividad de alta velocidad para un transporte sostenible e inteligente.
Cómo convertir estos hitos en realidad
Para hacer realidad estos objetivos, la estrategia señala un total de 82 iniciativas en diez ámbitos de acción clave («acciones emblemáticas»), cada una de ellas con medidas concretas.
Transporte sostenible
Para que el transporte sea sostenible, debe llevarse a la práctica lo siguiente:
• Promover la aceptación de vehículos, buques y aviones sin emisiones, así como de combustibles hipocarbónicos y renovables, y de las estructuras relacionadas. Por ejemplo, mediante la instalación de 3 millones de puntos de recarga públicos de aquí a 2030.
• Crear aeropuertos y puertos sin emisiones. Por ejemplo, a través de nuevas iniciativas para fomentar los combustibles sostenibles para el transporte aéreo y marítimo.
• Hacer que la movilidad interurbana y urbana sea saludable y sostenible. Por ejemplo, duplicando el tráfico ferroviario y desarrollando más infraestructuras para bicicletas en los próximos diez años.
• Ecologizar el transporte de mercancías. Por ejemplo, duplicando el tráfico ferroviario de mercancías de aquí a 2050.
• introducir mecanismos de tarificación del carbono y mejores incentivos para los usuarios. Por ejemplo, mediante la aplicación de un conjunto exhaustivo de medidas dirigidas a una tarificación justa y eficaz de todos los modos de transporte.
Inteligente
La innovación y la digitalización modelarán la forma en que los pasajeros y las mercancías se desplazarán en el futuro si se dan las condiciones adecuadas. La estrategia prevé:
• Hacer que la movilidad multimodal conectada y automatizada sea una realidad. Por ejemplo, facilitando que los pasajeros compren billetes para viajes multimodales y las mercancías se puedan transbordar fácilmente entre modos de transporte.
• impulsar la innovación y el uso de datos e inteligencia artificial (IA) para una movilidad más inteligente. Por ejemplo, apoyando plenamente el despliegue de drones y aeronaves no tripuladas, así como otras acciones para construir un espacio común europeo de datos sobre movilidad.
Resiliente
El transporte ha sido uno de los sectores más afectados por la pandemia de Covid-19 y muchas empresas del sector están experimentando enormes dificultades operativas y financieras. Por consiguiente, la Comisión se compromete a:
• Reforzar el mercado único. Por ejemplo, intensificando los esfuerzos y las inversiones para completar la Red Transeuropea de Transporte (RTE-T) de aquí a 2030 y ayudando al sector a "reconstruir mejor", mediante el aumento de las inversiones públicas y privadas en la modernización de las flotas de todos los modos de transporte.
• Hacer que la movilidad sea justa y equitativa para todos. Por ejemplo, haciendo que la nueva movilidad sea asequible y accesible en todas las regiones y para todos los pasajeros, incluidos aquellos con movilidad reducida, y haciendo que el sector sea más atractivo para los trabajadores.
• Aumentar la protección y la seguridad del transporte en todos los modos de transporte, incluso eliminando casi totalmente los accidentes mortales a aquí a 2050.
5% del PIB de la UE
El transporte aporta actualmente en torno al 5% al PIB de la UE y da empleo a más de 10 millones de personas en Europa, lo que, según señalan desde la Comisión, "hace que el sistema de transporte sea fundamental para las empresas europeas y las cadenas de suministro globales." Al mismo tiempo, añaden, "el transporte tiene unos costes para nuestra sociedad: emisiones contaminantes y de gases de efecto invernadero (el 25% del total de las emisiones GEi de la UE), ruido, atascos y accidentes de tráfico".
Este impulso para transformar el transporte llega en un momento en el que el sector se está recuperando del impacto del coronavirus. "Mediante un aumento de la inversión pública y privada en la modernización y la ecologización de nuestras flotas e infraestructuras y el refuerzo del mercado único, tenemos una oportunidad histórica para hacer que el transporte europeo no solo sea más sostenible, sino también más competitivo a escala mundial y más resistente ante cualquier perturbación en el futuro", afirman desde la CE.
Para que esta evolución no deje atrás a nadie, "es fundamental que la movilidad esté disponible y sea asequible para todo el mundo; que las regiones rurales y alejadas permanezcan conectadas; y que el sector ofrezca unas condiciones sociales buenas y empleos atractivos", concluyen.