El Diario Oficial de Castilla-La Mancha (DOCM) publicó la semana pasada la resolución de la Secretaria General de la Consejería de Hacienda y Administraciones Públicas por la que se anuncia la licitación del suministro de combustible, con un valor estimado del contrato de 14,2 millones de euros. Según recoge dicha resolución, el nuevo Acuerdo Marco incluye el gas licuado de petróleo (GLP) como uno de los tipos de combustible que se deberán suministrar para los vehículos de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, "lo que supone una novedad respecto al anterior, que se firmó en julio de 2014".
Según el comunicado difundido por el Gobierno regional, "el Ejecutivo de Emiliano García-Page incorpora así un combustible más respetuoso con el medio ambiente en la contratación de un suministro necesario para que los vehículos, maquinaría agrícola o forestal de los distintos entes, entidades y organismos de la Junta de Comunidades cumplan con los fines que tienen atribuidos". El gas licuado de petróleo es un combustible fósil cuya quema produce gases de efecto invernadero, desencadenantes del cambio climático. El nuevo Acuerdo Marco tendrá una duración de dos años, prorrogables por un máximo de otros dos.
Según el Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital, GLP es la abreviatura de "gases licuados del petróleo", denominación aplicada a diversas mezclas de propano y butano que alcanzan el estado gaseoso a temperatura y presión atmosférica, y que tienen la propiedad de pasar a estado líquido a presiones relativamente bajas, propiedad que se aprovecha para su almacenamiento y transporte en recipientes a presión.
Los GLP pueden encontrarse formando parte del crudo y del gas natural. Existen diversos procesos de refineria que los pueden producir:
- Reformado catalítico: Se alimenta de naftas ligeras para producir aromáticos y gasolinas. El rendimiento en GLP está entre un 5 – 10%.
- Cracking catalítico: Se alimenta de gas-oil o nafta produciendo etileno y propileno para petroquimica. El rendimiento en GLP está entre un 5 – 12%.
- Steam Cracking: Se alimenta con gas-oil o nafta produciendo etileno y propileno. El rendimiento en GLP está entre un 23 – 30%.
- Polimerización y alquilación: Se alimentan de butenos para producir gasolinas. El rendimiento en GLP está entre un 10 – 15%.
- Cracking térmico: Se alimenta de gas-oil y fuel-oil para producir gasolina. El rendimiento en GLP está entre un 10 - 20%.
- Coking y visbreaking: Se alimenta de gas-oil pesado y residuo para producir coque. El rendimiento en GLP está entre un 5 – 10%.
España importa prácticamente el 100% del petróleo y el 100% del gas que consume.