El BMW 1602, que destacaba por su "brillante color naranja", fue denominado como Elektro-antrieb, traducido al español como "accionamiento eléctrico". A raíz de la presentación de este modelo, surgió la actual gama i de BMW, basada en "un concepto integral de movilidad sostenible y revolucionario". BMW -destacan desde la compañía- tuvo "una visión de futuro excelente, puesto que se adelantaron a la gran crisis del petróleo, sucedida en 1973". Este modelo de cero emisiones se desarrolló sobre la base y soporte de los modelos contemporáneos de combustión, teniendo incluso una carrocería y apariencia exterior exactamente igual a estos modelos. En relación al motor eléctrico, este contaba con una potencia de 32 kilovatios (44 caballos) e iba instalado contiguo al conjunto de baterías.