Ámsterdam
La zona metropolitana de Ámsterdam, con casi dos millones y medio de habitantes, ubicada en la región central de la zona urbana del Randstad, ha anunciado una serie de metas ambiciosas para cumplir el objetivo de emisiones cero en el año 2030. Con tal fin, la ciudad más grande de los Países Bajos ha puesto en marcha diversas iniciativas, como la promoción del uso de la bicicleta y los desplazamientos a pie, la ampliación de los servicios de transporte público y la inversión en infraestructura de carga de vehículos eléctricos. En los últimos años, gran parte del centro histórico de la ciudad se ha hecho peatonal y se ha limitado el transporte de pasajeros en coche particular. Esta iniciativa favorece la seguridad de ciclistas y peatones, además de generar un ambiente animado en numerosas calles, plazas y otras zonas del centro de la ciudad.
A los visitantes y las personas que se desplazan para ir a trabajar se les dirige a diversos aparcamientos situados fuera del centro de la ciudad gracias a una política integral de aparcamientos que cubre toda la zona urbana. Otros medios de transporte, como los transbordadores que conectan el norte y el sur de la ciudad, pasarán a ser eléctricos o se reemplazarán por modelos híbridos en 2022.
Además de esta iniciativa para mejorar la seguridad de ciclistas y peatones y de su firme postura ante la reducción de emisiones, Ámsterdam está aumentando la inversión en estaciones de carga para vehículos eléctricos. La zona metropolitana de Ámsterdam se ha comprometido a instalar en los próximos años 20.000 estaciones de carga para vehículos eléctricos en la ciudad de Ámsterdam y las regiones del norte de Holanda, Flevolanda y Utrecht. Se trata de una inversión considerable que cuadruplicará con creces las 4.600 estaciones de carga públicas y semipúblicas que hay en la actualidad. Estos 20.000 puntos de carga adicionales funcionarán con energía renovable.
Barcelona
A principios de 2020, la zona metropolitana de Barcelona tomó las primeras medidas para lograr una región urbana de emisiones cero estableciendo una zona de bajas emisiones (ZBE) más estricta que prohíbe la circulación de los vehículos más nocivos para el medio ambiente (norma Euro II o inferior) los días laborables, de 7 de la mañana a 8 de la tarde. Esta medida, que afecta a la mayor parte de la zona metropolitana de la capital catalana, ha producido efectos inmediatos. Sólo un mes después de haber adoptado la medida disminuyeron los niveles de NOx en un 19% respecto a 2017, el año de referencia. Además del régimen de sanciones que se aplica en la zona de bajas emisiones, la administración de la ciudad también ofrece diversos incentivos. Un vehículo viejo, que no podrá acceder a la ZBE, se puede cambiar por una tarjeta de transporte público gratuito durante un periodo de tres años.
Junto a la disminución prevista de vehículos particulares en el centro de Barcelona, el objetivo de las inversiones municipales es impulsar el acceso al transporte público. La empresa Transportes Metropolitanos de Barcelona ha invertido 800 millones de euros en cuatro años para aumentar la frecuencia de las líneas 1-5, de modo que durante las horas punta la espera sea inferior a cuatro minutos. Además, se han comprado 23 autobuses de emisiones cero, lo que aumenta la cifra total de vehículos con propulsión eléctrica, híbrida o de gas natural a 266. El objetivo de Transportes Metropolitanos de Barcelona es disponer de una flota activa compuesta exclusivamente por vehículos eléctricos, híbridos o propulsados por gas natural comprimido para el año 2030.
Copenhague
Si bien el Pacto Verde Europeo es ambicioso, la ciudad de Copenhague ha establecido unos objetivos aún más exigentes. Disponer de un transporte climáticamente neutro en 2025 es el objetivo que ha establecido la capital danesa, para lo cual ha adoptado medidas de consumo energético y movilidad. Estas medidas se concentran en torno a objetivos directamente
cuantificables para vehículos y desplazamientos individuales. Copenhague se ha propuesto disponer de un transporte público climáticamente neutro cambiando el uso del coche particular por desplazamientos a pie, en bicicleta o en transporte público. En total, el 75% de todos los desplazamientos que se hagan en Copenhague en 2025 serán a pie, en bicicleta o en transporte público, es decir, serán climáticamente neutros.
La municipalidad de Copenhague predica con el ejemplo en todas sus iniciativas, por lo que sus vehículos funcionan con electricidad, hidrógeno o biocombustibles. Los municipios están aprovechando al máximo el entusiasmo de los ciclistas residentes de Copenhague y la topografía plana de la capital. Los ciclistas dispondrán de una extensa red de carriles bici que incluso contará con «autopistas ciclistas». Estas autopistas son el resultado de una excepcional cooperación entre 28 municipios y la región capital de Copenhague para fomentar un ciclismo más seguro, rápido y fácil que permita ir a trabajar en este medio de transporte.
Tras la inauguración de la primera ruta en 2012 se sumaron otras cinco en 2017. Esto marcó el inicio de una red de 45 rutas con una longitud total de 746 kilómetros. Además de estas autopistas, Copenhague tiene otros 400 kilómetros de vías ciclistas. Las estimaciones del estado danés sugieren que las autopistas para bicicletas podrían aumentar el número de desplazamientos en bicicleta en la Región Capital en 6 millones respecto a la cifra de 2019.
Si la opción de ir a trabajar utilizando estas autopistas para bicicletas no es la que prefieren los usuarios para acceder a la ciudad de Copenhague, siempre pueden subir la bicicleta a los trenes de cercanías (trenes S) de manera gratuita. Al año de haber adoptado esta medida en toda la red de 170 kilómetros, el número de bicicletas transportadas pasó de 188.000 a 630.000, es decir aumentó en más del 300%.
Una de las razones de este aumento del número de bicicletas transportadas es la conversión de vagones exclusivos para bicicletas con asientos abatibles. Todas las medidas mencionadas han generado considerables beneficios para la salud de los residentes de la región capital de Copenhague. Según las estimaciones municipales, esto equivale a una reducción de casi 1,1 millones de días de baja por enfermedad, además del ahorro de 20.000 toneladas de CO2 anuales. Si la capital danesa logra reducir los niveles de contaminación a un nivel similar al de las zonas rurales de Dinamarca, la esperanza de vida aumentará un año en 2040.
Sobre Medidas Permanentes y Buenas Prácticas
El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, en su condición de Coordinador Nacional de la Semana Europea de la Movilidad, anima a implementar medidas permanentes en materia de mejora de la movilidad tanto a los ayuntamientos, como a las empresas, organizaciones sociales e instituciones, dentro de sus ámbitos de competencias. El Ministerio propone así las siguientes buenas prácticas, cuyo objetivo no es otro que cambiar los hábitos de movilidad de toda la comunidad en general fomentando el uso de los "modos de transporte o desplazamiento menos contaminantes, siempre con el fin de alcanzar una movilidad sostenible".
Las medidas permanentes que se podrían promover haciendo referencia al tema de esta campaña, son las siguientes, según el Ministerio:
* Fomento de los desplazamientos a pie y en bicicleta
* Nuevos espacios de estacionamiento seguros en las estaciones de trenes y autobuses
* Instalación de un servicio público de reparación de bicis
* Creación de zonas de aparcamiento seguras para las bicicletas
* Zonas 30 y sistemas de control de acceso
* Peatonalización de calles y plazas
* Ampliación de las aceras y carriles bici en la calzada
* Planes de Accesibilidad
* Mejora y extensión de la red de transporte público, haciendo los desplazamientos más cortos en la distancia y en el tiempo
* Billetes multimodales
* Nuevas formas de uso y propiedad de vehículos
* Distribución de mercancías
* Planes de movilidad a los centros escolares
* Elaboración de materiales educativos
* Creación de centros de movilidad y servicios de información
Más allá de las administraciones, el Ministerio también propone (a empresas y otros actores) estas buenas prácticas
* Los Planes de Movilidad al Trabajo
* Campañas de sensibilización e informativas sobre los beneficios del uso de vehículos sostenibles
* Uso de videoconferencias
* Teletrabajo
* Flexibilidad horaria
* Fomento del uso de los VPM y del transporte público
* Fomento del uso del coche compartido