“Los humanos, desde que estamos en la Tierra, hemos tenido libre acceso al Sol, la principal fuente de energía que el planeta dispone”, escribe Pep Puig, presidente de Eurosolar España, en su último post en ER. Sin embargo, hoy el gobierno que preside Mariano Rajoy, junto con los mandamases energéticos, están tratando de poner todo tipo de barreras y prohibiciones al uso de la energía del sol por parte de los ciudadanos.
El abusivo pago de peajes a las instalaciones de autoconsumo es una de las medidas más esperpénticas con que lo intentan. Antonio Moreno Alfaro, lector de www.energias-renovables.com, lo explica así: “el usuario que tenga paneles fotovoltaicos deberá pagar por cada kWh producido por dichos paneles una cantidad prácticamente igual a la que el usuario sin paneles solares paga en concepto de peaje de acceso a las redes por cada kWh suministrado por la compañía eléctrica”. En otras palabras, quien tenga una instalación de autoconsumo deberá pagar a las compañías eléctricas no sólo por los kWh suministrados por éstas… ¡también deberá hacerlo por los kWh suministrados por su propia instalación!
¿Vamos a permitirlo? Semejante despropósito, que hasta ha merecido la burla de la revista Forbes –uno de los medios más poderosos del mundo– no solo es injusto sino que va contra el sentido común. Pero es que el sentido común pone en riesgo los privilegios que disfrutan desde hace décadas las empresas de UNESA. Y, ya se sabe, no hay que morder la mano de quien financia campañas electorales y acoge en sus consejo de administración a ex ministros.
Sin embargo, por más que se empeñen en tratar de impedirlo, la energía puede ser más asequible, más limpia y más segura. Sí, todo a la vez. Para acelerar la transición hacia ese nuevo modelo energético, en el que las renovables, la eficiencia energética, el autoconsumo y la generación distribuida serán los protagonistas, es vital contar con gente cada vez mejor informada; gente que no se resigne, consciente de que los ciudadanos, unidos, podemos provocar profundos cambios.
Este número de septiembre está dedicado a todas esas personas que ya han tomado conciencia de ello. Personas que a título particular, o desde sus empresas o puestos de trabajo, siguen apostando, pese a todas las dificultades –incluida la amenaza de multas millonarias– por el derecho a producir su propia energía y, con ello, avanzar hacia ese modelo energético democrático, de costes bajos y predecibles y libre de CO2. La reforma es “una seria invitación de Gobierno a los ciudadanos para que se vuelvan antisistema”, decía hace poco Teresa Ribera, secretaria de Estado de Medio Ambiente con el Gobierno de Zapatero y hoy en Isofotón. Bueno, quizá no sea necesario echarse al monte, pero lo cierto es que motivos no faltan.
Hasta el mes que viene.
Luis Merino
lmerino@energias-renovables.com
Pepa Mosquera
pmosquera@energias-renovables.com