La publicación de la Recomendación (UE) 2021/1749 de la Comisión Europea, sobre el principio de “primero, la eficiencia energética”: de los principios a la práctica, viene a demostrar que la prioridad de la eficiencia energética no es un enunciado retórico, sino que se traduce en directrices y ejemplos para todo el sistema energético que las administraciones públicas deberían aplicar si cumplieran plenamente las directivas europeas de renovables, eficiencia energética de los edificios y mercado interior de la electricidad.
Ahorrar antes de construir
En octubre de 2020 se presentó la Estrategia Oleada de Rehabilitación (Renovation Wave) con el objetivo de crear estándares más exigentes de eficiencia energética de los edificios basados en el principio de “primero, la eficiencia energética”, por el que las decisiones de planificación e inversión energética deben tener en cuenta antes medidas alternativas de eficiencia energética, tal como lo define el Reglamento (UE) 2018/1999, sobre la gobernanza de la Unión de la Energía y la Acción por el Clima.
Ahora se confirma que la palabra clave es “antes”. Antes de invertir en nuevas infraestructuras energéticas se han de considerar alternativas para dotar de mayor eficiencia la demanda y el suministro de energía. El objetivo es tratar la eficiencia energética como el “primer combustible” en el que invertir antes que en otras fuentes de energía más costosas. En la edificación se puede resumir como “ahorrar antes de construir”.
Es el mismo principio que establece la Directiva 2010/31/UE, de eficiencia energética de los edificios, al definir el edificio de consumo de energía casi nulo como aquel que, habiendo alcanzado la más alta eficiencia energética, la poca energía que requiere la genera en el propio edificio o su entorno con energías renovables. El orden de intervención queda claro, primero la más alta eficiencia y después las renovables “in situ”.
La Directiva (UE) 2018/844, que modificó la directiva de 2010, incluyó, además de la alta eficiencia energética y el autoconsumo, las aplicaciones inteligentes, los puntos de recarga para el vehículo eléctrico y el indicador de preparación para aplicaciones inteligentes en los edificios como el conjunto de elementos que desarrollan los recursos energéticos distribuidos y la flexibilidad energética en el edificio autosuficiente e inteligente. La edificación se convierte en parte esencial del sistema energético y de la transición energética por su función en la gestión de la demanda y la reducción de emisiones.
Aplicación del principio de “primero, la eficiencia energética” en la edificación
Las actuaciones de mejora de la eficiencia energética en los edificios, nuevos y aquellos que se rehabiliten, deben contemplar el ciclo de vida completo, reforzando la circularidad para reducir las emisiones durante toda la vida del edificio. Se debe optimizar la rehabilitación hacia renovaciones profundas mediante una hoja de ruta de las actuaciones por cada edificio.
La más alta eficiencia energética debe incorporarse a la financiación de la rehabilitación, incluyendo la energía como factor fundamental, y a las normas de contratación pública para la adquisición, construcción y alquiler de edificios. Es imprescindible la integración de la prioridad de la eficiencia energética y de la digitalización de los edificios en la planificación y la ordenación del territorio, así como en las licencias municipales y en los códigos de construcción, incluyendo las infraestructuras de recarga para vehículos eléctricos.
Es necesario elevar el ámbito de la rehabilitación a mayor escala, de distrito, barrio o ciudad, para aumentar la capacidad de gestión de la demanda, capacidad de energía flexible, almacenamiento, agregación, creación de comunidades energéticas y promover nuevos comportamientos que eviten el derroche energético.
17 directrices de medidas de eficiencia energética en los edificios
1 Inclusión de las rehabilitaciones de edificios en las subastas de energías renovables.
2 Planes de financiación innovadores que incluyan las hipotecas de eficiencia energética.
3 Vincular la financiación a la aplicación del indicador de preparación para aplicaciones inteligentes.
4 Vincular la financiación a las auditorias ex post en función de los ahorros obtenidos.
5 Facilitar el acceso de los edificios y agregadores a los mercados de capacidad y de adecuación de la oferta.
6 Modular el precio de la electricidad, el precio de distribución y otras cargas para incentivar la gestión de la demanda, el almacenamiento de electricidad y calor en los edificios.
7 Vincular la localización de los edificios al potencial de energías renovables, comunidades de energías renovables, calefacción y refrigeración urbana renovable y transporte público.
8 Reducir la demanda energética mejorando primero la envolvente del edificio antes de otras medidas, como sustitución de instalaciones de calefacción y refrigeración.
9 Obligación de instalar puntos de recarga para bicicletas y vehículos eléctricos.
10 Hacer de los dispositivos y soluciones de control climático, activos y pasivos, un elemento de diseño técnico del aislamiento de la envolvente, del sistema de aire acondicionado o de calefacción sobre la base de las características de la ubicación del edificio.
11 Considerar la infraestructura verde y azul en la ordenación del territorio mediante la aplicación de ventilación natural, techos y muros verdes, y la reducción del efecto isla de calor.
12 Utilizar contratos de rendimiento energético para asegurar ganancias de eficiencia energética, medibles y predecibles.
13 Establecer sistemas de gestión energética de los edificios.
14 Implantar sistemas inteligentes de gestión de la energía que integren los recursos energéticos distribuidos mediante la conectividad y la interoperabilidad.
15 Utilizar tecnologías de eficiencia energética para optimizar el mantenimiento y el funcionamiento de los edificios.
16 Seguimiento, análisis y notificación continuos de la eficiencia energética en los edificios.
17 Instalar un sistema de información sobre consumo de energía a través de contadores inteligentes y dispositivos inteligentes.
Abaratar los costes de la energía tiene mucho que ver con el lugar que ocupe la eficiencia energética en el sistema energético.
Este artículo se publicó primero en La Oficina de Javier García Breva.