Las dificultades actuales y las consideraciones de coste relativas a la producción, distribución y almacenamiento del hidrógeno a bordo de los barcos han limitado hasta ahora el interés del sector por su uso directo como combustible marino. "Sin embargo, al producir hidrógeno directamente a bordo y utilizar allí el gas, junto con gas natural licuado (GNL), la solución resulta mucho más viable y en un plazo mucho más rápido de lo que sería posible de otro modo", señalan desde Wärtsilä en un comunicado.
"Nuestros motores de gas ya son capaces de utilizar mezclas de hidrógeno y gas natural licuado y nuestros esfuerzos futuros consistirán en alcanzar el 100% de combustible de hidrógeno. Estamos totalmente comprometidos a apoyar de todas las formas posibles la descarbonización de las operaciones marítimas. Este proyecto es un ejemplo más de este compromiso, y estamos muy contentos de asociarnos con otras partes interesadas para hacer que el objetivo de la OMI para 2050 sea alcanzable", ha señalado Lars Anderson, director de Gestión de Productos y Soporte de Ventas de Wärtsilä Marine Power.
El concepto que utilizará el consorcio de empresas se basa en la combinación de GNL con vapor para producir hidrógeno y dióxido de carbono (CO2). El hidrógeno obtenido –hidrógeno azul, por tanto– se utilizará directamente en una mezcla con gas natural en motores de combustión interna (ICE) o en pilas de combustible, eliminando así la necesidad de almacenar hidrógeno a bordo. El CO2 se licuará utilizando la corriente criogénica del GNL que se utilizaría como combustible de todos modos y, posteriormente, se eliminará en tierra. Los petroleros pueden utilizar el CO2 almacenado como gas inerte durante la descarga.
Según Wärtsilä, el equipo necesario puede instalarse fácilmente en la cubierta de un buque comercial. Este innovador concepto apoyará la transición gradual del sector marítimo del GNL al hidrógeno, sin necesidad de realizar grandes ajustes en las tecnologías de a bordo de los buques. "Sólo será necesario el abastecimiento de GNL y, al aumentar progresivamente la producción de hidrógeno, se reducirá al mismo ritmo el consumo de metano fósil y el deslizamiento de metano asociado", afirman.