La ejecución de esos proyectos, que están sujetos a la subasta de capacidad pendiente de celebración, requerirá de más de 7.000 empleos equivalentes, entre directos e indirectos, y su mantenimiento y operación, de otros 400 durante su vida operativa. Desde EDPR señalan que en la contratación de trabajadores y proveedores se priorizarán los del lugar y, particularmente, aquellos afectados por el cese de actividad en la térmica de carbón.
Hidrógeno, almacenamiento y eólica
La actuación comprene la construcción de una planta de elaboración de hidrógeno mediante electrólisis (hasta 100 MW tras su completo desarrollo), que utilizará el agua del lago de As Pontes y nuevas fuentes de energía renovable. Tendrá una capacidad productiva anual de hasta 14.400 toneladas de H2 y se espera que genere más de 300 empleos, directos e indirectos, entre la fase de ejecución y la de explotación.
En el entorno se ubicará también un almacenamiento energético con una potencia instalada de generación de 570 MW. Este almacenamiento consistirá en una central hidroeléctrica de bombeo que empleará como depósito inferior el propio lago, y como superior, un nuevo embalse que permitirá una mejor gestión del sistema eléctrico propiciando una maximización renovable en el mix energético.
El almacenamiento estará ubicado entre los núcleos de Castelo y A Esfaparra y está previsto que genere cerca de 5.000 empleos, directos e indirectos, considerando tanto los trabajos de construcción como la futura gestión de la planta.
Además, se desarrollará un complejo eólico compuesto por cuatro parques que suman algo más de 270 MW y que utilizarán turbinas de última generación. Estos se extenderán por los municipios de As Pontes, A Capela, Xermade, Monfero, Valdoviño, Moeche, Cerdido y As Somozas, y generarán alrededor de 2.500 puestos de trabajo asociado a las distintas fases del proceso.
Acceso continuado a energía limpia y asequible
El conjunto de estas actuaciones suma casi un gigavatio de potencia verde instalada y es "la apuesta más ambiciosa realizada hasta el momento por la descarbonización de la economía en Galicia", señalan desde EDP. "Gracias a ello, el entorno dispondrá de acceso continuado a energía asequible y limpia, lo cual constituye una fortaleza para la captación y asentamiento de industrias estratégicas, amén de para fomentar la sostenibilidad y competitividad del tejido productivo", añaden.
EDP destaca, asimismo, que "esta iniciativa para hacer de Ferrolterra la capital de la energía verde se alinea con los objetivos que persiguen el EU Green Deal y el programa Next Generation y con todas las estrategias del gobierno español ligadas a la transición ecológica y justa.
Rocío Sicre, directora general de EDPR España, pone también el acento en que el proyecto "da idea una vez más, de la importancia estratégica que Galicia tiene para EDPR desde hace más de 20 años. Además, es reflejo del positivo impacto de las renovables en materia de empleo de calidad, favoreciendo la dinamización económica y social de la población gallega. Se trata de la apuesta de descarbonización de la economía más ambiciosa que se ha llevado a cabo en Galicia hasta la fecha“.