El Grupo Bosch consiguió reducir sus emisiones de carbono en 80.000 toneladas en 2020, convirtiéndose en la primera empresa industrial que opera a nivel global de forma neutral en carbono. Esto implica que, en sus más de 400 localizaciones distribuidas a lo largo de todo el mundo, desde el desarrollo hasta la producción y la administración, ya no dejan huella de carbono. Para 2030, el grupo se ha marcado como objetivo reducir las emisiones a lo largo de toda la cadena de suministro.
Siguiendo esta línea, y consciente de que el sector industrial es el responsable de más del 30% del consumo de energía de nuestro país (datos del IDAE), Bosch Termotecnia trabaja por buscar soluciones que ayuden a la descarbonización de los procesos energéticos industriales y la producción de calor. Bosch Industrial celebró el pasado martes el primero de los cuatro encuentros digitales - Industrial Efficient Solutions 2021– en los que está dando a conocer las últimas tendencias del mercado y las novedades de la marca.
La primera jornada abordaba la temática de la “Descarbonización: Calderas de hidrógeno, calderas híbridas y calderas eléctricas”. En palabras de Alejandro Baschwitz, responsable del Negocio Industrial, “actualmente, las calderas son sistemas que duran más de 30 años, por lo que es importante prepararlas para el futuro. Por ello, desde Bosch, trabajamos continuamente porque nuestras calderas estén listas y disponibles para ser utilizadas con los combustibles del futuro”.
Baschwitz destacó, asimismo, que "entre un 20 y un 30% del uso de la energía industrial actual se podría reducir utilizando las tecnologías de última generación ya disponibles" y que "el futuro uso de los combustibles alternativos deberá considerarse a la hora de diseñar y construir nuevas instalaciones”.
Alternativas a los combustibles fósiles
La compañía ofrece ya diferentes alternativas ecológicas a los combustibles fósiles para que las industrias puedan reducir su huella de forma sostenible.
• Calderas de Hidrógeno: para todas las calderas industriales de Bosch en el rango de potencia media y grande, la marca ofrece soluciones para el uso de hasta un 100% de hidrógeno. Si la cantidad de hidrógeno disponible fluctúa o es insuficiente, el hidrógeno se puede utilizar como complemento, por ejemplo, del gas natural en un quemador multicombustible para su proceso de generación de vapor o agua caliente. También es posible suministrar todas las calderas industriales convencionales de Bosch "H2-ready". Esto le facilita la conversión a hidrógeno en una fecha posterior.
• Calderas de biogás: las empresas industriales, como las cervecerías, a menudo producen biogás a partir del reciclaje de residuos orgánicos. Bosch ofrece todas las calderas de agua caliente y vapor de Bosch como variantes de biogás. Para ello, la marca adapta el sistema exactamente a la composición de su biogás individual para garantizar una alta eficiencia y emisiones mínimas. Dado que la caudal de biogás producido no siempre es suficiente para cubrir la demanda de calor requerida, es común instalar quemadores especiales para varios combustibles. De esta forma, la composición del combustible utilizado se puede ajustar dinámicamente según la disponibilidad de biogás en cada momento.
• Calderas para bioaceite y otros combustibles líquidos: el bioaceite y los combustibles especiales como el alcohol o el aceite de pescado se acumulan como subproductos en muchas áreas de la producción moderna. Su uso como combustible en las salas de calderas reduce el consumo de combustibles fósiles para la generación de calor. Al mismo tiempo, se pueden evitar los costes de logística y eliminación. Bosch equipa sus calderas de agua caliente y vapor con soluciones específicas para un combustible específico, como precalentamiento de aire y combustible, limpieza neumática automática de la cámara de combustión y quemadores especiales para asegurar un mínimo de emisiones.
• Calderas de recuperación de calor residual: la producción industrial y la generación de energía descentralizada, por ejemplo, con unidades de cogeneración o turbinas, produce gases de escape calientes. Las calderas de recuperación Bosch del calor residual de los gases pueden aprovechar la energía recuperada para producir agua caliente o vapor. Esto reduce la demanda total de energía. Además de las calderas de recuperación puras, también están disponibles calderas de recuperación con quemador. Estas generan hasta un 15% de la potencia máxima de la caldera utilizando calor residual. En la operación a cargas parciales, pueden llegar a cubrir más del 50% de la producción.
• Calderas híbridas: la proporción de empresas industriales y plantas modernas de suministro de energía con generación de energía regenerativa in situ está aumentando desde hace muchos años. Con las calderas híbridas de Bosch se pueden utilizar excedentes de hasta 5 MW por caldera para la producción de agua caliente o vapor, reduciendo así el consumo de combustibles al mínimo. También es posible diseñar calderas híbridas en combinación con biocombustibles como variante neutral de CO2. La opción híbrida está disponible para todas las calderas de Bosch de las series UT-L, UL-S y ZFR.
• Calderas de vapor eléctricas: con la nueva serie ELSB es posible utilizar electricidad generada de forma ecológica a partir de fuentes renovables para la generación de vapor. No se producen gases de escape en el proceso. La caldera eléctrica de Bosch es compatible con todos los componentes de la sala de calderas, como sistemas para tratamiento de agua o gestión de condensados. La conectividad integrada de su sistema de control asegura que la caldera solo se encienda cuando su electricidad verde esté disponible.