Aunque el hidrógeno ofrece un apoyo para reducir a cero las emisiones netas de carbono para 2050, su adopción generalizada depende del despliegue de fuentes de energía renovable abundantes, entre las cuales figuran la energía eólica marina. Por ello, a fin de maximizar el uso de energía eólica y minimizar las pérdidas de energía, el nuevo consorcio abre el camino de la producción de hidrógeno verde marino.
Según sus impulsores, el proyecto Hope (Producción de hidrógeno en alta mar para Europa, por sus siglas en inglés), constituye un hito fundamental en el escenario de la energía renovable, ya que se trata del mayor proyecto marino de su clase en todo el mundo, y se prevé que tanto la unidad de producción, como las infraestructuras de exportación y distribución entren en servicio a mediados de 2026.
El proyecto combina la experiencia y los conocimientos colectivos de las nueve organizaciones aglutinadas en el consorcio y representa todo un emblema para la Comisión Europea y la Asociación para un Hidrógeno Limpio. Los nueve socios del consorcio cubren toda la cadena de valor del hidrógeno renovable, lo que allana el camino hacia un futuro sostenible y descarbonizado.
El consorcio Hope
Alfa Laval
Alfa Laval se ha especializado en el desarrollo de los sectores de energía, marina, alimentación y aguas. Sus productos y servicios abarcan un amplio abanico de industrias en más de 100 países y se centran en optimizar el rendimiento de los procesos de sus clientes, que permite el fomento del crecimiento responsable y la consecución de sus objetivos de negocio y medioambientales.
