Iberdrola ha hecho balance hoy de su actividad minihidrálica. La compañía explica, en el comunicado que ha difundido hace unos minutos, que ha desarrollado, a lo largo de los últimos años, "un proyecto de renovación y modernización de 45 de las 92 centrales minihidráulicas con las que cuenta en España, al que ha destinado alrededor de diez millones de euros durante los últimos tres años". El objetivo de las obras no ha sido otro que mejorar la producción de energía eléctrica y prolongar la vida útil de las instalaciones.
También mejoras ambientales
Según la nota, "los principales trabajos realizados por Iberdrola en sus minihidráulicas españolas han consistido en el remozamiento electromecánico de las turbinas y alternadores, que son los equipos más importantes de este tipo de instalaciones". Además, la empresa ha llevado a cabo "rehabilitaciones de obra civil en los canales y azudes y ha sustituido los sistemas de control que operan estas infraestructuras de generación". Así mismo, ha ejecutado mejoras ambientales, tales como "la construcción de escalas para peces en azudes o el vallado de canales".
Sesenta empleados
La modernización de estas instalaciones ha contado con la participación de unos sesenta empleados de la firma "y numerosas empresas locales del entorno de las mismas se han visto beneficiadas también por el proyecto". Iberdrola, que dispone de una potencia minihidráulica instalada en España de 306 megavatios (MW) al cierre del primer semestre de 2014, ha acometido la citada remodelación en centrales de estas características ubicadas en el País Vasco (tres), la Comunidad Valenciana (siete), Castilla y León (15), Castilla-La Mancha (cuatro), Navarra (nueve) y La Rioja (siete).