El ITER, coordinador del proyecto, explica que en una central hidroeléctrica el agua, en su caída entre dos niveles, se hace pasar por una turbina hidráulica la cual transmite la energía a un generador donde se transforma en energía eléctrica. Debido a su coste y función, las turbinas se consideran puntos de vital importancia en la producción de energía eléctrica, siendo necesario mantener el máximo nivel de servicio durante toda su vida útil.
La cavitación es uno de los principales problemas que se encuentra en las turbinas hidráulicas, siendo una de las principales causas de fallo en este tipo de elementos. A su vez, estas máquinas son cruciales en la producción de energía eléctrica en las plantas hidroeléctricas por lo que es esencial poder monitorizar y prevenir este efecto.
El proyecto CAV-TH desarrollará un sistema para que permitirá detectar y clasificar diferentes fenómenos de cavitación de la forma más precoz posible. La solución estará basada en la monitorización a tiempo real de las vibraciones y fluctuaciones de presión producidas en las turbinas, que generará un flujo de datos con los que se podrá alimentar una potente algoritmia para detectar las diferentes tipologías de cavitación que se den.
A partir de estos resultados se desarrollará una plataforma digital que servirá para asistir en la toma de decisiones a los responsables del mantenimiento de estas máquinas.
El proyecto CAV-TH cuenta con un presupuesto de casi 450.000 € y está cofinanciado por el Programa Estatal de Investigación, Desarrollo e Innovación.