Las infraestructuras del subsuelo urbano, como Madrid Calle 30, tienen -según Madrid Subterra- un amplio potencial de aprovechamiento de energías residuales libres de CO2. Madrid Calle 30 es una sociedad de economía mixta, adscrita al Área de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid. Al asumir la vicepresidencia de la asociación Madrid Subterra, Madrid Calle 30 ha puesto de relieve la importancia de las colaboraciones que se desarrollan en el seno de Madrid Subterra, haciendo hincapié en el potencial que ofrece la energía reciclada. Según la consejera apoderada de Madrid Calle 30, Rosalía Gonzalo, “la colaboración público-privada para conseguir energía limpia desde las grandes infraestructuras es uno de los grandes retos que tenemos en el horizonte. Es importante potenciar estas sinergias -ha apuntado Gonzalo- haciendo que cada institución aporte su granito de arena y desde aquí me comprometo a apoyar cualquier iniciativa en este sentido”. Recientemente, el Aula Madrid Subterra de la Universidad Politécnica de Madrid hizo públicos los proyectos realizados en el curso 2018-2019, entre los que destaca el potencial térmico del agua que drena a diario la infraestructura subterránea de Madrid Calle 30, con capacidad para refrigerar 4.256 viviendas. Esta iniciativa académica -el Aula- está promovida y financiada por la asociación Madrid Subterra, de la que Madrid Calle 30 es miembro desde sus inicios.
Sobre la Empresa de Mantenimiento y Explotación de la M30
Madrid Calle 30 es una sociedad de economía mixta, adscrita al Área de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid. Fue constituida inicialmente para llevar a cabo el proyecto de transformación del viario de la M-30, con el objetivo de mejorar la competitividad de Madrid como centro de actividades económicas, culturales, educativas y de ocio. Con ese fin, la empresa ejecutó entre los años 2004 y 2007 la reforma de la M-30, con la renovación de siete enlaces y la construcción de más de medio centenar de kilómetros de túnel, una obra sin parangón en la historia de Madrid y muy contestada por buena parte de la ciudadanía capitalina.
Actualmente la empresa gestiona la explotación, conservación y mantenimiento del anillo distribuidor Calle 30 y las infraestructuras y espacios de su entorno, tales como enlaces, puentes, zonas verdes y áreas libres incluidas dentro del anillo a través de su socio privado y adjudicatario del contrato de gestión del servicio público mediante sociedad de economía mixta, la Empresa de Mantenimiento y Explotación de la M30, S.A.
Dicho socio privado, para la gestión de la conservación y mantenimiento de la infraestructura, dispone de un personal de explotación formado por 280 profesionales cualificados y con gran experiencia, cuyo objetivo final es realizar las labores con rapidez y la calidad que demandan los madrileños del siglo XXI.
Asimismo cuenta con una flota compuesta por 80 vehículos de diversos tipos, dependiendo de la función a la que están destinados, de entre la cual destacan los camiones para atención a incidencias o furgones para señalización de cortes de carriles o barredoras auto-propulsadas para la limpieza.