El pozo Fushen-1 ha sido perforado en granito datado hace 250 millones de años. Desde que se inició la exploración en agosto de 2023, Sinopec ha probado diferentes tecnologías innovadoras desarrolladas de forma independiente, incluida la combinación de perforación de doble accionamiento e inyección de alta presión, para alcanzar el límite de temperatura de la roca seca caliente estipulado por las normas nacionales de la industria energética. Esta actuación también ha impulsado el conocimiento de las tecnologías clave de detección y evaluación de los recursos geotérmicos profundos.
Sinopec llevará a cabo ahora nuevas investigaciones y pruebas de campo en el pozo Fushen-1 para establecer allí la primera plataforma que integre investigación, educación y experimentación de la geotermia profunda en el sur de China, y desarrollar métodos teóricos y sistemas técnicos aplicables a la región. Todo ello con el objetivo de ayudar a China a alcanzar la descarbonización de su mix energético.
“El desarrollo y la aplicación de la geotermia profunda tienen perspectivas prometedoras, ya que se trata de un recurso energético renovable estable, fiable, ecológico y con bajas emisiones de carbono, que presenta las ventajas de contar con grandes reservas, una amplia distribución y ser respetuoso con el medio ambiente”, señalan desde Sinopec.
Según los estudios geológicos realizados en China, los recursos geotérmicos de roca seca caliente, en un rango de 3 kilómetros a 10.000 metros bajo tierra, equivalen a 856 billones de toneladas de carbón estándar. Si sólo se utilizaran el 2% de estos recursos, aportarían casi 3.000 veces el consumo anual de energía de China en 2023.
