La Consejería de Economía y Empleo lleva años promoviendo -asegura el EREN- la introducción a nivel comercial de tecnologías que permiten aprovechar eficientemente los recursos geotérmicos de baja y muy baja temperatura para la generación de calor. El desarrollo de esta tecnología en la Comunidad -continúa el ente- es "relativamente reciente, aunque ha experimentado un cierto incremento en los últimos seis o siete años". A lo largo de ese lapso, el EREN ha puesto en marcha -explica en su balance- "actuaciones que se han orientado inicialmente no solo al conocimiento de la tecnología y su grado de implantación en la comunidad autónoma, sino también al conocimiento de los recursos geotérmicos y la identificación de variables que pudieran frenar su desarrollo".
Colaboraciones
Para ello, el EREN, ha contado además con la colaboración de otros organismos dependientes de la Consejería, "especializados en las distintas disciplinas asociadas a un proyecto geotérmico (el conocimiento geológico y los trabajos mineros), como la Sociedad de Investigación y Explotación Minera de Castilla y León, cuya implicación ha permitido identificar recursos geotérmicos con un importante potencial de aprovechamiento térmico e identificar necesidades a nivel normativo". El EREN colabora también con la Fundación Santa Bárbara, "especializada en formación en trabajos mineros, movimientos de tierra y energías renovables, para identificar las necesidades formativas necesarias para los profesionales del sector".
Geoplat
Estos esfuerzos se han focalizado de forma destacada -asegura el EREN- "en una intensa labor en la difusión de la tecnología, el apoyo económico a su implantación y a la formación de profesionales, cuyo fruto se ha plasmado en un incremento de la potencia instalada con bombas de calor geotérmicas de más de ocho megavatios térmicos (8 MWt) en los últimos cinco años". En el ámbito nacional, el EREN está presente en la Plataforma Tecnológica Española de Geotermia (Geoplat), como marco de trabajo coordinado que aglutina a todos los agentes implicados en el desarrollo de este sector.
El EREN explica la geotermia de baja temperatura
«Geotermia es el calor de la tierra y engloba el calor almacenado en rocas, suelos y aguas subterráneas, independientemente de su temperatura, profundidad o procedencia. Su origen se encuentra en la propia estructura geologica de la tierra (núcleo, manto y corteza) y fluye muy lentamente hacia la superficie terrestre mediante conducción, convección y radiación. La geotermia de baja temperatura aprovecha recursos con temperaturas inferiores a treinta grados centígrados (30ºC), mediante la utilización de bombas de calor e intercambiadores geotérmicos en contacto con el terreno. Estas captan el calor del suelo de forma muy eficiente, dada la estabilidad térmica del subsuelo frente a la variabilidad del ambiente. Transfieren el calor desde un foco frío, el suelo, hacia un foco caliente, el espacio a calentar, siguiendo un ciclo termodinámico en el que es necesario un aporte de trabajo, generalmente con un compresor eléctrico.
COP
El rendimiento de una bomba geotérmica (COP, Coefficient Of Performance), es mayor que la unidad, debido a que se está transfiriendo calor de un lugar a otro usando energía, en lugar de generarlo directamente. Para poder utilizar este calor son necesarios sistemas de captación de la energía del subsuelo, como, intercambiadores horizontales, que son tuberías enterradas en el terreno a escasa profundidad; intercambiadores verticales, unas tuberías insertadas en sondeos de hasta 250 metros de profundidad; sondeos de extracción e inyección de aguas subterráneas o la propia cimentación de los edificios.
Ventajas
Utilizar estos sistemas tiene grandes ventajas para los usuarios, destacando, su bajo coste de operación y de mantenimiento, a pesar de un coste inicial elevado, derivado generalmente de la ejecución de los intercambiadores geotérmicos; el importante ahorro energético que conllevan, que en función del combustible con el que se compare y del sistema geotérmico utilizado puede ser de hasta el 70% en calefacción o hasta el 50% en refrigeración; contar con la calefacción y refrigeración en un mismo equipo, aunque tenga una limitación de la temperatura de uso: 55 – 60 ºC. Otras ventajas de estos sistemas son la ausencia de ruidos y residuos; su compatibilidad con otras renovables como la solar térmica; la ausencia de depósitos de combustible; la ausencia del riesgo por legionela; el balance energético positivo, al producir hasta cuatro veces más que la energía eléctrica utilizada, la reducción de emisiones de CO2; y su flexibilidad, que permite utilizarlo en todo tipo de climas y todo tipo de terrenos».
Qué es la geotermia (vídeo delInstituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía)