Los incentivos los ha asignado a través del Programa de Subvenciones al Desarrollo Energético Sostenible Andalucía A+. Según la agencia, "las ventajas que conlleva el empleo de la geotermia como energía renovable para uso doméstico –frente a las tecnologías convencionales– son que, además de no ocasionar ruido, carecer de impacto arquitectónico y evitar la emisión de gases de efecto invernadero a la atmósfera, supone un ahorro económico para el usuario que se sitúa en torno al 60% del coste energético asociado". Según los datos recogidos en el estudio sobre el potencial geotérmico regional elaborado por la Agencia Andaluza de la Energía, en Andalucía es "destacable" la existencia de un importante potencial de aprovechamiento de la energía geotérmica "en el entorno de Granada, Sevilla y Córdoba, principalmente, donde una elevada densidad de población hace más rentable su uso en climatización".
La agencia divulga
La geotermia es el calor de la tierra. En el subsuelo, la temperatura se mantiene prácticamente estable durante las 24 horas del día y durante todo el año. Así, a profundidades de más de dos metros, esta es, siempre, de alrededor de 15 grados centígrados. Según la agencia andaluza, esa temperatura es ya aprovechable, es suficiente, para producir agua caliente sanitaria o calor en invierno y frío en verano (climatización). En la actualidad, la mayoría de las instalaciones geotérmicas andaluzas corresponden a viviendas unifamiliares, "si bien son cada vez más las empresas del Sector Servicios que se suman a la implantación de estas", según la agencia. Entre los "casos más destacados", la agencia señala una instalación de climatización mediante bomba geotérmica que da servicio a un geriátrico en la localidad onubense de El Cerro de Andévalo (foto).
Para aprovechar el calor del subsuelo existen diversas posibilidades –continúa la agencia–, siendo la fórmula más utilizada la que hace circular un fluido a través de una tubería en circuito cerrado capaz de extraer el calor del terreno y pasarlo a una bomba de calor, la cual aportará el salto extra de temperatura necesario para utilizar este fluido en la preparación de agua caliente sanitaria o en calefacción. Existe también la posibilidad de utilizar la instalación de forma reversible. De esta manera, en los meses de verano, la misma instalación puede absorber calor del edificio y transferirlo al subsuelo a través del mismo circuito de tuberías. Así, el edificio cuenta con una sola instalación para calefacción y refrigeración y el yacimiento geotérmico recibe frío en invierno y calor en el verano equilibrando las aportaciones energéticas al terreno. Otra de las grandes ventajas de estos sistemas –concluye la Agencia Andaluza de la Energía– reside en que "las condiciones geológicas requeridas son poco exigentes ya en que la práctica totalidad del territorio se puede aprovechar la estabilidad térmica del subsuelo".
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