Según una información del Ministerio Industria, Energía y Minería (MIEM), "los más de 200 paneles fotovoltaicos, que representaron una inversión de 150.000 dólares, generan energía equivalente al consumo de un millón de computadoras al año".
De acuerdo con la información suministrada, este proyecto significará un ahorro en la emisión de 100 toneladas anuales de dióxido de carbono.
En el acto de inauguración, realizado en la sede central montevideana, el ministro Paganini dijo que la autogeneración y la microgeneración con capacidad de volcar excedentes de energía a la red, "es lo que se viene, porque la tecnología de autogeneración ya no necesita grandes economías de escala cuando es fotovoltaica", con lo cual es posible instalar paneles fotovoltaicos en los techos de un edificio sin necesidad de recurrir a grandes plantas.
Además destacó que se trata de energía que no genera emisiones de efecto invernadero y es sustentable, por lo que consideró que este tipo de inversiones "deberían multiplicarse".
"Esto muestra el desafío que tenemos por delante: generar un ecosistema donde lo público y lo privado conviven -agregó-. La red eléctrica sigue siendo fundamental, clave, porque es donde nos conectamos para intercambiar energía con otros, pero ya no es un negocio en el que uno genera y todos los demás consumen".
En ese sentido, afirmó que la "red eléctrica transformada" representa un desafío tanto para los privados como para UTE, la estatal Usinas y Trasmisiones Eléctricas, "porque tiene que pasar a verse como un lugar donde se intercambia energía entre muchos".
"Esa transformación va a llevar su tiempo", explicó Paganini, porque implica cambios en las tecnologías y en el modelo de negocios a los cuales dijo que el MIEM impulsará con la simplificación de los trámites y la flexibilización de las condiciones de los requisitos técnicos.