El campo solar fotovoltaico (FV) de El Rancho, en el municipio gaditano de Jerez de la Frontera, producirá, según las estimaciones de Statkraft, electricidad equivalente a la demanda media anual de 30.000 familias. El parque, que tendrá una potencia de 42,2 megavatios (MW), va a demandar -según la empresa estatal noruega- una inversión de más de 30 millones de euros. Statkraft calcula que las obras durarán unos doce meses y que soportarán, "en los periodos punta", más de 100 puestos de empleo, "de los que la mayor parte serán locales". El Rancho -informa la firma noruega- se une así a los otros ocho proyectos fotovoltaicos que Statkraft ya ha desarrollado en Andalucía: cuatro plantas que opera en Alcalá de Guadaíra (Sevilla), y otras cuatro, puestas en marcha recientemente en los municipios gaditanos de San José del Valle y Jerez de la Frontera.
Statkfraft quiere distinguir El Rancho por su "excelencia ambiental". Así, la empresa ha anunciado que contará con un Plan de Actuaciones de Conservación de la Biodiversidad, que conllevará "una inversión de más de dos millones de euros en medidas medioambientales durante la vida útil de la planta". Entre las medidas planteadas por la firma nórdica, destaca la creación de "un hábitat de interés para el águila imperial en zona de campiña cerealista", iniciativa que va a pasar por el desmantelamiento de 3 kilómetros de líneas en áreas que ahora mismo registran "una alta incidencia en la avifauna", la instalación de "majanos y bebederos", la repoblación del entorno con conejos (base de la dieta de esa rapaz) y la protección de líneas eléctricas frente a electrocuciones y colisiones.
Por otro lado, y con el objetivo de evitar el uso de biocidas, el control de la vegetación en el interior del recinto de la planta -adelanta Statkraft- se realizará con pastoreo de ganado o con siega: "estos tendrán que realizarse en el periodo otoñal o a principios del invierno para no afectar al periodo reproductor de las aves silvestres".
Asimismo, la empresa noruega instalará una pantalla vegetal, compuesta por árboles y arbustos de la zona de al menos 1,5 metros de altura, para minimizar el impacto visual de la nueva planta. La firma escandinava matiza en todo caso que "el vallado perimetral de la planta permitirá la circulación de la fauna de la zona, para lo que la compañía habilitará gateras y huecos de paso de dimensiones suficientes".
Por otra parte, para la limpieza de los paneles fotovoltaicos, solo se podrán utilizar productos de limpieza biodegradables "y, en todo caso, se reducirá al mínimo necesario el consumo de agua". Además, Statkraft adelanta que "toda la tierra vegetal que se mueva durante el proceso de construcción será acopiada y debidamente conservada para su uso posterior en labores de restauración de zonas afectadas por la obra".
En el comunicado que ha difundido con motivo del comienzo de la sobras en Jerez, la compañía asegura por fin que tanto en la fase de construcción como durante la operación y mantenimiento promoverá la economía circular: "se realizará un seguimiento, una clasificación y se facilitará el tratamiento de todos los residuos generados con el objetivo de su valorización".
Statkraft, que considera Andalucía un polo de desarrollo para su actividad, opera en la región ahora mismo cuatrocientos megavatios de potencia (200 MW de las cuatro plantas de Cádiz y otros 200 MW de las cuatro plantas de Alcalá de Guadaíra, Sevilla). A todos ellos vienen a sumarse ahora los 42 de El Rancho.
Artículos relacionados
· La compañía estatal noruega Statkraft compra la ingeniería española Enerfin por 1.800 millones de euros
