CVE Chile difundió ayer un comunicado en el que anuncia que ha adquirido "cuatro proyectos de la española Solarpack con una capacidad total de 45 MWp [megavatios pico de potencia] por un valor de 45 millones de dólares". Según el gerente general de CVE Chile, Pierre Boulestreau, "esta operación acelera nuestro desarrollo en Chile y consolida nuestra posición de liderazgo en el mercado de los Pequeños Medios de Generación Distribuida. En los próximos años -ha añadido Boulestreau-, planeamos mantener un ritmo constante de desarrollo de alrededor de 40 MWp anuales, alcanzando una capacidad de generación renovable de 220 MWp para 2022".
Hace diez años
El presidente ejecutivo de Solarpack, Pablo Burgos, se ha manifestado "encantado de haber llegado a este acuerdo con CVE Chile, bajo el cual comenzaremos a ejecutar para ellos una serie de proyectos de energía solar fotovoltaica por un total de 44,7 MW DC en las próximas semanas". Burgos ha manifestado así mismo su compromiso con el país andino: "hace 10 años Solarpack se estableció en Chile como pionero en el desarrollo de la energía solar activando una tecnología que desde entonces ha transformado el mercado eléctrico del país. Diez años después, seguimos comprometidos con el país con nuestros 58,1 MWp en funcionamiento".
Solarpack hace balance
Según los datos que ha facilitado, Solarpack cuenta con seis campos fotovoltaicos en funcionamiento en Chile: Calama Solar 3, que fue la primera instalación solar a escala industrial de Suramérica (potencia total instalada: 1,1 MWp); Pozo Almonte Solar 2 (8,1 MWp) y Pozo Almonte Solar 3 (17,3 MWp), que producen -informa la empresa- el 13% de la energía consumida por la minera Doña Inés de Collahuasi; Pozo Almonte Solar 1, que cuenta con 10,5 MWp; y dos plantas de 10,5 MWp (Calama Solar 1 y Puerto Seco Solar) ubicadas en Calama, dentro del desierto de Atacama. Además, Solarpack ha construido y vendido recientemente una planta de 9,4 MWp ubicada en Diego de Almagro.
La estrategia de CVE Chile
El productor independiente de energía renovable CVE Chile explica en la nota que ha difundido que su estrategia -"en línea con la visión del grupo CVE sobre el mercado de las energías renovables"- está basada en la descentralización de la producción "y en un modelo de venta directa de energía a través de contratos privados". Tras un período de cuatro años de venta de electricidad a través de un mecanismo de precios estabilizados, CVE Chile explica que podrá vender su energía renovable directamente a empresas industriales en la región de Santiago a través de acuerdos privados de compra (PPA, por sus siglas en inglés) o acuerdos de compra de energía a largo plazo.
CVE
CVE se define como un grupo que "desarrolla, financia y construye plantas de energía solar y unidades de metanización para operarlas a largo plazo". Situado en Marsella, con oficinas regionales en Toulouse, Rennes y Fontainebleau, CVE (Cambiemos la Visión de la Energía) opera a nivel internacional en África y a través de sus filiales en Chile y América del Norte. La compañía declara una plantilla de 110 trabajadores y un "parque operativo y en construcción" que suma 155 megavatios de potencia acumulada, "con una facturación energética prevista de 36 millones de euros.
Solarpack
La compañía vasca Solarpack trabaja en el "desarrollo, financiación, construcción, operación y gestión de parques de generación solar fotovoltaica". La compañía, que declara más de 129 profesionales distribuidos en 10 países, ha desarrollado, según reza su perfil de empresa, "529 MWp en todo el mundo, habiendo construido en modalidad EPC (llave en mano) catorce proyectos que suman 190 MWp". Actualmente, Solarpack declara una cartera de instalaciones en explotación de 252 MWp repartidos en España, Chile, Perú e India; "además, Solarpack realiza la operación y mantenimiento de trece plantas que suman 160 MWp y gestiona activos en proyectos propios y de terceros por un total de 330 MW".