Los paneles instalados tienen una potencia de 4,4 kW y un valor de 27.000 euros. El albergue, que ha sido construido por la Asociación MUM, ha sido concebido como una ecoaldea autosuficiente y acoge –durante un periodo de 6 a 18 meses– a ocho familias monoparentales víctimas del maltrato, brindándole el apoyo necesario para recuperar su autoestima y reincorporarse a la sociedad.
Este es el primer proyecto en el que colabora Viesgo en España. La eléctrica, que forma parte del patronato de Energías Sin Fronteras, había colaborado previamente con la ONG en proyectos situados en el extranjero, especialmente en zonas rurales aisladas de Centroamérica donde no llegaban el agua potable ni la electricidad.
La ecoaldea de MUM contaba con todos los servicios básicos a excepción del suministro eléctrico, un componente esencial para poder acoger a las familias. Por ello, la asociación acudió a Energía Sin Fronteras en busca de una solución energética asequible. Gracias a la energía solar y al apoyo aportado por Soltec y Viesgo, desde el pasado 24 de enero el albergue dispone ya de electricidad.
Este proyecto forma parte de la estrategia de EsF de avanzar en la lucha contra la pobreza energética en España, al igual que viene haciendo desde hace 13 años en una veintena de países en vías de desarrollo. Viesgo también tiene en marcha diferentes iniciativas para luchar contra la pobreza energética y con esta finalidad ha suscrito acuerdos con los Gobiernos Autonómicos de Cantabria, Asturias, Galicia y Castilla y León.
La ecoaldea
La Ecoaldea MUM se ubica en un pueblo de la Comunidad de Madrid, donde tiene cedido por el ayuntamiento un albergue con parcela, por un periodo de treinta años, para que las ocho familias (madres e hijos/as) puedan vivir, trabajar, educar a los niños y recibir apoyo terapéutico si lo necesitan.
El proyecto incluye un huerto ecológico, una granja de pequeños animales y talleres artesanales donde la mujeres trabajan para hacer la iniciativa completamente sostenible.