Naturgy (antes Gas Natural Fenosa) proyecta construir un parque solar fotovoltaico de casi un megavatio (0,99 MW) en Almonacid de Zorita (Guadalajara), a 350 metros al este de la central nuclear José Cabrera (conocida como central nuclear de Zorita) y a 100 metros del vallado del área protegida de la instalación. La potencial afección de la planta fotovoltaica sobre la central nuclear -informa el CSN- es el paso de vehículos y personas, tanto durante la fase de construcción como durante la fase de operación del parque solar (fase que durará al menos 25 años). Pues bien, según ha informado hoy el Consejo de Seguridad Nuclear, la evaluación del proyecto ha concluido que "no resulta necesario requerir a Naturgy la adopción de ninguna medida adicional". Sin embargo, el Consejo considera que, con el fin de que el CSN pueda hacer un control y seguimiento adecuado del mantenimiento de las condiciones actuales de protección física del Almacén Temporal Individual (ATI), Naturgy deberá informarle sobre las medidas de vigilancia finalmente adoptadas y sobre las actuaciones futuras de la empresa titular de la planta fotovoltaica.
La central nuclear José Cabrera se encuentra en el término municipal de Almonacid de Zorita (Guadalajara) y fue la primera central nuclear que entró en operación en nuestro país, en 1968. Tras 38 años de funcionamiento se puso fin a su actividad por Orden Ministerial, el 20 de abril de 2006. Se trata del primer desmantelamiento completo de una central nuclear en España. Las actividades previas al desmantelamiento, desarrolladas entre 2006 y 2009 bajo la responsabilidad del operador, consistieron fundamentalmente en la gestión del combustible gastado y en el acondicionamiento de los residuos de operación. Tras la finalización de las actividades previas y la autorización ministerial correspondiente, el 11 de febrero de 2010 se trasfiere al titularidad de la central nuclear José Cabrera a Enresa para la ejecución del Plan de Desmantelamiento y Clausura.
La Empresa Nacional de Residuos Radiactivos SA (Enresa) concibe los proyectos de desmantelamiento como un proceso industrial, orientado a la liberación completa del emplazamiento y a la adecuada gestión de los materiales resultantes. Las tareas a ejecutar incluyen entre otras: la retirada de elementos convencionales, el desmontaje de componentes radiológicos, la descontaminación y demolición de edificios, y la restauración ambiental del emplazamiento. Zorita cesó su actividad en 2006. Catorce años después continúan las labores de desmantelamiento.
La central nuclear José Cabrera era propiedad de Unión Fenosa en el momento de cesar su actividad (año 2006). El 11 de febrero de 2010 se trasfirió la titularidad de José Cabrera a la Empresa Nacional de Residuos Radiactivos (Enresa) para la ejecución del Plan de Desmantelamiento y Clausura.