El proyecto, propiedad de Acciona y Swicorp y apoyado financieramente por el World Bank’s Finance Corporation (IFC) y Asian Infrastructure Investment Bank (AIIB), consta de tres campos y está previsto comience a operar en marzo de 2019. Con una potencia de 186 MWp, sus promotores calculan que producirá “energía equivalente al consumo de unos 150.000 hogares egipcios, y que evitará la emisión de 297.000 toneladas de CO2 anualmente”.
“El complejo de Benban –informa STI Norland- está promovido por la administración egipcia y acogerá 41 plantas fotovoltaicas de titularidad privada, con una potencia conjunta de 1.800 MW. Estas plantas forman parte de un programa de incentivos (feed-in-tariff) establecidos en la Round 2 convocada en 2016”.
STI Norland explica en el comunicado que ha difundido que estos proyectos afianzan su posición “en un mercado con gran potencial como es el del norte de África y Oriente Medio, donde, según datos de la Agencia Internacional de la Energía, se prevé un incremento en capacidad renovable de un 60% en cinco años, hasta superar los 40.000 megavatios”.