La mayor potencia instalada es para las de tipo comercial, con 1,54 GW, seguida de la residencial con 1,51 GW y la rural, con 0,52 GW.
Según la Asociación Brasileña de Energía Solar Fotovoltaica (ABSOLAR), desde 2012 el mercado fotovoltaico brasileño ha empleado a más de 110 mil personas en los últimos ocho años. "La energía solar jugará un papel cada vez más estratégico en la consecución de los objetivos de desarrollo económico del país, ya que es la fuente renovable que más puestos de trabajo genera en el mundo, dijo su director general de ABSOLAR, Rodrigo Sauaia.
Por su parte, desde la Asociación Brasileña de Generación Distribuida (ABGD) se asegura que son las unidades de los consumidores residenciales donde se encuentran la mayoría de estas instalaciones, con el 72 %; seguido por las unidades comerciales, con el 18 %; las rurales, el 7 %; e industriales, el 3 %.
Según el presidente de ABGD, Carlos Evangelista, "es necesario acabar con el mito de que la generación distribuida es para grandes emprendedores y consumidores más adinerados; hay proyectos de todos los tamaños y con diversas fuentes, además de innumerables proyectos sociales que llevan los beneficios de la generación distribuida a los más necesitados.
