Las 433 empresas y asociaciones solares europeas que firmaban la declaración conjunta representan a otras 6.000 organizaciones solares. En ella, pedían a las autoridades de la UE que retiren de la mesa las medidas proteccionistas de defensa comercial, una estrategia que según los firmantes "tendría un impacto negativo en el empleo europeo y pondría en riesgo muchos empleos locales y verdes". Según sus estimaciones, provocarían "una caída de entre 655.000 y 890.000 puestos de trabajo en 2024 y de, al menos, 600.000 en 2025".
Además, el sector solar recordaba en su carta a los responsables políticos que en el panorama actual de fabricación solar en Europa "menos del 3% (1,5 GW) del despliegue solar previsto en este continente (54 GW) se produce íntegramente en Europa".
“Estamos horrorizados por los rumores de que se podría iniciar una investigación de defensa comercial sobre la energía solar. Esto es una afrenta a los mensajes claros que el sector solar ha expuesto repetidamente. Tenemos soluciones mejores, más rápidas y más efectivas para la crisis que enfrentan los fabricantes europeos. Europa no debe traicionar sus objetivos de seguridad climática y energética”, decía Walburga Hemetsberger, CEO de SolarPower Europe:
Los firmantes recordaban, asimismo, que “hace sólo cinco años, "los derechos antidumping y compensatorios vigentes sobre los paneles solares importados de China, Taiwán y Malasia fueron abolidos” por las "consecuencias negativas” que tuvieronn: “los empleos solares, la inversión en proyectos y el despliegue solar disminuyeron drásticamente" durante el período de aplicación de estas medidas de defensa comercial, y provocaron un aumento de los costos para nuestros clientes y consumidores, "sin recuperar las fábricas solares de Europa".
Frente al proteccionismo, SolarPower Europe pide a los líderes de la UE:
• Considerar garantías estatales y líneas de crédito para los fabricantes europeos de energía solar fotovoltaica que luchan por sobrevivir en las difíciles condiciones actuales del mercado tras la disminución de los precios de los módulos solares importados.
• Ajustar y prolongar las normas de ayuda estatal contempladas en ell Marco Temporal de Crisis y Transición para cubrir también los costos de funcionamiento de las fábricas (opex) y reducir la complejidad del acceso y la implementación;
• Acompañar la financiación nacional con una herramienta financiera a nivel de la UE para la fabricación solar, como un Banco de Fabricación Solar, vinculado al Fondo de Innovación o un nuevo Fondo de Soberanía de la UE.
Aquí puedes leer la noticia que publicamos el pasado 30 de noviembre