Entre las cifras ofrecidas en una infografía de producción propia, puede observarse que la generación distribuida fotovoltaica alcanza concretamente 4.905,8 MW, repartidos en más de 410 mil sistemas. Por clase de consumo, lidera el de carácter residencial, con más de 300 mil sistemas (que representan el 74 % del total) y suman una potencia instalada de 1.922,5, el 39,2 % de toda la existente.
Luego se ubica la comercial y de servicios, con 67.107 sistemas (16,3 %) que reúnen 1.854,8 MW, un 37,8 % de la potencia instalada del sector. En orden de importancia sigue la rural, con 28.730 instalaciones (7 %) y una potencia instalada de 639,9 MW, el 13 %.
El último sector destacable por clase de consumo es el industrial: 9.770 sistemas (2,4 %), en conjunto 423,3 MW, un 8,6 %.
Respecto de la generación distribuida por estados, ocupan las tres primeras posiciones Minas Gerais (887 MW, el 18,1 %), São Paulo (613,6 MW, 12,5 %) y Rio Grande do Sul (601,8 MW, 12,3 %).
Es interesante puntualizar la cantidad de empresas que forman parte de la cadena productiva del sector fotovoltaico, en un relevamiento según datos del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) de los incorporados al programa Finame (acrónimo de la Agencia Especial para el Financiamiento Industrial), que plantea una exigencia de contenido nacional para acceder a condiciones especiales de financiación.
Estas son: 64 volcadas a la construcción de kits de sistemas fotovoltaicos, 10 a rastreadores solares, 9 a inversores fotovoltaicos, 8 a módulos, uno a string box y uno a baterías.