He aquí una serie de fake news fotovoltaicas que se están reproduciendo en los últimos meses. Decía un colega que en ocasiones pareciera que en este sector viaja antes el rumor que la información. Para evitarlo, la mejor receta es parar un segundo y analizar los datos.
• No todas las plantas fotovoltaicas son macroplantas
El registro de instalaciones (a cierre de 2020) muestra cómo el grueso de la potencia fotovoltaica instalada sigue en plantas menores de 50 MW. Solo hay nueve instalaciones mayores de 50 MW y solo dos mayores de 300 MW. Si miramos a los nuevos desarrollos sucede algo similar. Según el Miteco hay 5,7 GW de plantas grandes (mayores de 50 MW) en desarrollo, mientras que cualquier CCAA con buen recurso solar tiene más. Solo la Junta de Extremadura comunicaba en enero de 2020 que tramitaba 6,2 GW de plantas FV, todas menores de 50 MW.
• No todos los proyectos con permiso de acceso se van a construir
Hasta ahora, el primer paso en el desarrollo de nuevas plantas ha sido la solicitud del permiso de acceso, pero posteriormente el proyecto se puede ‘caer’ si no obtiene la autorización ambiental o administrativa, el terreno o la financiación. Además, el RD-ley 23/2020 está actuando de filtro con sus hitos de madurez. Tras su aprobación se redujeron en 20 GW los permisos solicitados y concedidos, y esto sucederá de nuevo en 2022 cuando deberán acreditar el trámite ambiental.
• El desarrollo de instalaciones no va crecer hasta el infinito
De hecho, se construye lo que marcan los objetivos del PNIEC. En 2019 se instalaron 4,2 GW fotovoltaicos, muy poco más de los 3,9 GW que se subastaron en 2017. En 2020 se instalaron 2,8 GW, cifra muy cercana a la que hace falta cada año hasta 2030 para cumplir los objetivos del PNIEC. Para este año y los siguientes se esperan cifras similares. En las subastas de enero se adjudicaron 2 GW FV (que tendrán que entrar para 2023) y las siguientes prevén unos 1,5 GW anuales, que entrarían los años posteriores.
• La fotovoltaica a construir hasta 2030 no ocupa lo mismo que la provincia de Guipúzcoa
Con un uso de suelo estándar de 2 hectáreas/MW la capacidad fotovoltaica prevista en el PNIEC hasta 2030 ocuparía unas 55 mil hectáreas, un 0,1% de la superficie total del país. De hecho, la FV del PNIEC se podría instalar en todo el terreno de erial (2 millones de hectáreas) y solo ocuparía un 2,3% de ese espacio. En una comparación similar, la FV del PNIEC ocuparía solo un 0,25% de los terrenos agroganaderos.
• Solo con el autoconsumo no se pueden cumplir los objetivos del PNIEC
En los últimos años España está en cifras de autoconsumo estándar para los países de nuestro entorno: 459 MW en 2019 y 596 MW en 2020. Asumiendo que nos mantuviéramos durante los próximos diez años en el rango alto de ese orden de magnitud, se harían unos 6 GW de autoconsumo hasta 2030. Con medidas más agresivas de promoción se podrían aumentar estas cifras, pero no parece plausible alcanzar los 27,7 GW necesarios para cumplir el PNIEC.
• Una instalación grande no tiene per se más impacto ambiental que muchas plantas pequeñas
Una gran instalación en un espacio desnaturalizado o sin gran valor ecológico tendrá un bajo impacto mientras que muchas instalaciones pequeñas tendrán un elevado impacto si están en una zona de alta biodiversidad. Por ello, el sistema de autorización ambiental evalúa cada caso separadamente mediante estudios de impacto y medidas particulares, desautorizándolos en zonas de alto valor ecológico.
• Una instalación fotovoltaica no supone necesariamente una transformación del terreno negativa
Siendo cierto que requieren grandes superficies para desarrollarse, el impacto de las plantas FV no tiene por qué ser irreversible ni de gran magnitud. Si se siguen las medidas adecuadas simplemente se trata de una transformación a la que no estamos habituados. De hecho, si comparamos el efecto sobre la biodiversidad de una instalación fotovoltaica con el principal uso no natural de la tierra en España, la agricultura intensiva, la primera produce un ecosistema mucho más diverso en los terrenos en los que se instala.
• No todas las renovables tienen el mismo impacto ambiental
El impacto de las renovables en su conjunto es en sí algo incongruente pues éstas se parecen entre sí lo mismo que las tecnologías convencionales. Es tan similar la energía eólica a la fotovoltaica o a la biomasa como la nuclear al gas natural o la hidráulica. En particular la cuestión del impacto en avifauna es relevante por ser España un territorio con gran diversidad y donde precisamente la equiparación de la fotovoltaica con otras tecnologías renovables como la eólica, es más desacertada.
En conclusión, las renovables en general y la fotovoltaica en particular, atraen, como es natural, la atención de la sociedad. Los que tenemos voz pública debemos promover un debate basado en datos que evite que se formen marcos que no se ajustan a la realidad.
• Este artículo se ha publicado en el número de abril de Energías Renovables en papel, nuestro número 200, que puedes descargar en formato PDF aquí.