En pocos años Huawei ha entrado en nuestras vidas. No tanto por sus inversores fotovoltaicos –donde aún queda camino que andar, como reconoce Perez Spiess–, sino por sus teléfonos móviles. La compañía china ya es el tercer fabricante del mundo. El año pasado vendió 153 millones de móviles y pisa los talones al segundo, Apple. Huawei se mueve en esta liga de los grandes nombres y sus números son para impresionar. Ahí van algunos.
De sus 180 mil empleados, 80 mil se dedican a la I+D. Es la primera empresa del mundo en registros de patentes internacionales, a un ritmo de 40 patentes al día desde 2014. Invierte en I+D la friolera de 13.800 millones de dólares anuales. Para entender la cifra basta decir que la inversión de España es de 13.300 millones, según datos de Eurostat. Eso representa, por cierto, un 1,19% de nuestro PIB, muy lejos de la media europea que se sitúa en el 2,03%. En el ranking de inversión global en I+D, Huawei está en sexta posición, y en este caso, por delante de Apple.
Pero hablemos de la división solar de Huawei. En 2015 desbancó a SMA como principal fabricante mundial de inversores, reconocen consultoras especializadas en renovables como IHS, Markit o GTM. En buena medida porque han sido capaces de abrirse a nuevos mercados. Su experiencia en telefonía móvil les ha obligado a construir infinidad de repetidores de telecomunicaciones en países con redes eléctricas débiles de Latinoamérica o de África. Y esos repetidores funcionan con energía solar y baterías.
En España los inversores de Huawei son menos conocidos, “pero eso cambiará rápidamente –insiste Perez Spiess–. Me gusta decir que España es la bella durmiente, y creo que ahora está empezando a despertar”. Y Huawei quiere estar cuando despierte para que sus inversores compartan protagonismo con los grandes del sector en la nueva era que se abre para la fotovoltaica en nuestro país.
En la jornada, a la que han asistido instaladores de toda España, se han explicado las características de las soluciones que propone Huawei para instalaciones domésticas y para grandes plantas. Antonio Antón López, gerente de Operaciones y Desarrollo en SumSol, ha explicado las cualidades técnicas de los inversores, “preparados para que en cualquier momento puedan incorporarse baterías a la instalación, y con un diseño muy compacto, con un volumen y un peso –pesa 10,6 kg– inferior a otros de la competencia”.