Jan Osenberg, asesor político principal de SolarPower Europe, ha declarado: “Según nuestro análisis, la norma de la UE sobre energía solar en tejados, incluida en la Directiva sobre Eficiencia Energética de los Edificios, podría impulsar la instalación de 150 a 200 GW adicionales de capacidad solar en tejados en la UE entre 2026 y 2030”. Esta potencia equivale a la demanda del electricidad de 56 millones de hogares europeos. La capacidad total de energía solar sobre tejado en Europa superaba los 170 GW a finales de 2023.
Esa nueva potencia correspondería a la energía solar instalada en el 60% de las cubiertas de los edificios públicos de la UE, ya que no todos van a ser aptos para entrar en el ámbito de aplicación de la EU Solar Rooftop Standard, que liberará, sobre todo, el potencial de las grandes cubiertas, como las de oficinas, edificios comerciales o aparcamientos. Otros edificios, como los agrícolas o los históricos, pueden quedar excluidos.
La Norma Solar para Cubiertas de la UE se aplicará a los nuevos edificios no residenciales y públicos a partir de 2027, a los edificios no residenciales existentes que sean objeto de reformas importantes a partir de 2028, a los nuevos edificios residenciales a partir de 2030 y a todos los edificios públicos existentes adecuados a partir de 2031. En SolarEurope consideran que los edificios públicos, como escuelas y hospitales, se verán especialmente favorecidos por la normativa, al beneficiarse de la reducción de los gastos que conlleva la energía solar.
Según Bloomberg NEF, las normas solares proactivas pueden aumentar la rentabilidad de la inversión entre un 8 y un 11%, en comparación con las instalaciones retroactivas. Además, la norma solar está destinada a empoderar a una parte más amplia de la sociedad, reduciendo los obstáculos a la adopción de la energía solar en edificios de varios pisos.
“La energía fotovoltaica en los tejados tiene que ser la puerta de entrada a la electrificación inteligente”, dice Osenberg. “La calefacción y los coches solares reducirán los costes de los hogares sostenibles. La combinación inteligente de la energía solar en los tejados con los vehículos eléctricos y las bombas de calor también reducirá el impacto en la red, e incluso proporcionará apoyo directo a la red mediante la prestación de servicios de flexibilidad en momentos de tensión en la red”. Ahora bien, advierte que para ello “habrá que eliminar los cuellos de botella de la electrificación y garantizar que los operadores de la red puedan aprovechar este potencial de flexibilidad”.
Los Estados miembros de la UE disponen de dos años para transponer la nueva directiva a la legislación nacional.