Los trabajadores afectados cobrarán el 90% de su salario neto. Isofotón pagará hasta un máximo neto de 700 euros, que se sumarán al abono realizado por la Seguridad Social, durante el tiempo que se prolongue el expediente. La intención de la empresa es paralizar la fábrica durante cinco semanas y, posteriormente, dos semanas cada mes hasta que se cumplan los 90 días. Las fechas más probables para el cese de actividad se extienden del 15 de febrero a finales de julio, según han indicado los sindicatos.
También existe la posibilidad de que si se reactiva la demanda, si Isofotón recibiera pedidos durante las fechas en las que se ha programado parar la fabricación, se podría suspender el ERE y más tarde se decidiría si se recupera o no antes del 31 de diciembre de 2009”, según han explicado los sindicatos. Para velar por los acuerdos pactados se ha acordado la creación de una comisión en la que estarán representados la empresa, los sindicatos y la Junta de Andalucía. Este órgano, que se reunirá una vez al mes, sería el encargado de decir si el ERE temporal se prorroga en función de la evolución de la actividad en la empresa.
Empresa y trabajadores, un acuerdo positivo
Isofotón ha manifestado a Energías Renovables que “valora positivamente el acuerdo alcanzando, reiterando plena confianza en mantener el clima de diálogo y entendimiento logrado durante las negociaciones. La compañía mantiene la confianza en la reactivación del mercado a partir del segundo semestre del año”.
De la misma manera, el Comité de Empresa ha valorado positivamente cómo se ha resuelto la negociación. En declaraciones a Energías Renovables, el presidente del Comité de Empresa, Juan Francisco Avilés, ha afirmado “estamos satisfechos dentro de lo que se puede esperar de un ERE. La actitud de la empresa en una situación tan difícil como la que estamos pasando ha sido de conciliación y de trabajo. Han mostrado ganas de sacar la empresa adelante”.
Una vez alcanzado el acuerdo entre la empresa y los representantes de los trabajadores ahora será la Junta de Andalucía la que dictamine sobre las condiciones finales del expediente de regulación de empleo temporal. El plazo máximo para que lo haga es de quince días.
Isofotón decidió iniciar un expediente de regulación de empleo temporal, según explicó a Energías Renovables “ante la paralización temporal del mercado fotovoltaico por el cambio regulatorio en España y por las restricciones de crédito a la financiación de proyectos fotovoltaicos, causadas por la actual crisis financiera internacional”.
La empresa argumenta que la dificultad de acceso a la financiación de los clientes de Isofotón para los proyectos fotovoltaicos en España y en los principales mercados internacionales (EEUU, Alemania e Italia), y las expectativas de que esta situación pueda perdurar en el primer cuatrimestre de 2009 hacen necesario plantear la suspensión temporal de los contratos para adecuar la producción a la demanda actual y evitar un fuerte crecimiento de stock no financiable. Con esta medida Isofotón tiene previsto reducir su stock, su necesidad de compras y fortalecer su posición financiera, consolidando el futuro de la compañía a medio y largo plazo.