El Consejo de Dirección de Avaesen, ante la magnitud del proyecto, ha decidido crear un consorcio de empresas suficientemente competitivo para lograr la adjudicación de la instalación fotovoltaica. “Se trata de un proyecto de gran envergadura” -explica José Antonio Solar, presidente de Avaesen- “puesto que es la primera fase de una iniciativa del Gobierno marroquí que pretende impulsar el uso de las energías renovables hasta los 2.000 MW. Para poder competir con otras empresas europeas que también opten a este proyecto, creemos que es importante crear este consorcio en el que pueden participar las empresas que lo deseen. De esta manera, todos juntos, nos convertiremos en una opción viable, solvente y competitiva”.
El Gobierno de Marruecos, a través de MASEN (Maroccan Agency for Solar Energy), ha sacado a concurso público internacional la concepción, construcción, explotación, financiación y mantenimiento de un proyecto de producción eléctrica por energía solar de una potencia de 500 MW en la localidad marroquí de Ouarzazate. La instalación tendría que ser operativa en 2015.
La planta fotovoltaica se ubicaría sobre una superficie de 3.300 hectáreas, en la región de Tamezghitene. Esta zona cuenta con una radiación solar de 7,22 KWh/día/m2. Cerca de allí, a unos 4 kilómetros de distancia está la presa Mansour Eddhabi, con una capacidad de almacenamiento de 440 hm3, además de que este lugar se encuentra próximo a las líneas de transmisión existentes de 225/60 KV.
La importancia de este proyecto radica en que se incluye en una iniciativa del Gobierno de Marruecos que pretende incentivar el uso de las energías renovables en el país africano mediante la producción de electricidad con energía eólica, hidráulica y solar. El plan es que en el año 2020 se hayan instalado 2.000 MW con cada una de esas tecnologías.
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