Núñez de Balboa acaba de obtener el permiso de puesta en marcha por parte del Ministerio para la Transición Ecológica y ya ha iniciado las pruebas de energización por parte de Red Eléctrica de España (REE). Así, las previsiones apuntan a que la planta entrará en operación en el primer trimestre de 2020. El proyecto ha sido promovido por Iberdrola, con la colaboración de la empresa extremeña Ecoenergías del Guadiana, "en la modalidad de codesarrollo conjunto". La financiación que ha hecho posible este parque ha salido de dos entidades públicas: el Banco Europeo de Desarrollo, que ha aportado 145 millones de euros, y el Instituto de Crédito Oficial (ICO), que ha prestado hasta 140 millones de euros para financiar este megaparque, que pasa por ser ahora mismo el más grande de todo el Viejo Continente: 1.430.000 paneles solares, 115 inversores y dos subestaciones. Sus promotores estiman que el parque generará energía limpia para abastecer las necesidades de 250.000 personas al año (población equivalente a las de Cáceres y Badajoz) y evitará la emisión a la atmósfera de 215.000 toneladas de CO2 al año. Así mismo, apuntan que Núñez de Balboa ha conseguido acuerdos de compraventa de energía a largo plazo (PPA, Power Purchase Agreement) con el grupo de distribución Uvesco; con el operador de telecomunicaciones Euskaltel; y con el banco Kutxabank.
Anunciado en julio de 2018, el acuerdo privado con Kutxabank, por un período de diez años, fue el primero de este tipo -informa Iberdrola- suscrito por una empresa energética y un banco en el mundo. Según la compañía eléctrica, la totalidad de la electricidad consumida por el Grupo financiero en todas sus instalaciones y sucursales distribuidas por España procederá de la planta solar Nuñez de Balboa. El acuerdo con Euskaltel fue alcanzado en octubre del año pasado y el suscrito con Uvesco, en noviembre.
Iberdrola define
Los denominados PPAs, acrónimo de Power Purchase Agreement, son acuerdos de compraventa de energía a largo plazo que proporcionan estabilidad a las inversiones de los generadores de energía, mientras aseguran a grandes consumidores el suministro de energía renovable, a precios competitivos y predecibles. Según la empresa, esta es una fórmula que, además, les ayuda a cumplir con sus objetivos de sostenibilidad y lucha contra el cambio climático, a través de una certificación del origen de la energía asociada a estos contratos.