La planta solar María Elena, de 72 MW, está ubicada en el municipio del mismo nombre, en la región de Antofagasta, y tiene una producción de 206 GWh de energía limpia al año. Consta de 226.152 módulos solares distribuidos en 189 hectáreas y fue construida en el año 2015, con un costo de 190 millones de dólares.
El principal accionista de Weg-4 es Atlántica Sustainable Infrastructure, que invierte en energías renovables en varios países y posee el 34,7% del fondo. El otro gran accionista es Penta Companía de Seguros de Vida, con un 29,7%. A ellos se suman otros 40 inversores.
La planta María Elena es la tercera que adquiere Weg-4 en el país, con lo que totaliza 170 MW en operación y representa el 2,5% del total de capacidad instalada en energía solar en Chile. En abril de 2020 adquirió la planta fotovoltaica San Pedro III, ubicado en Calama, con una capacidad instalada de 58 MW; y en enero de 2021 la planta Doña Carmen, en La Ligua, de 40 MW.
Según información de la prensa local, la nueva inversión se inscribe en la estrategia de Weg-4 de adquirir centrales que enfrentan problemas financieros y trabajar con los bancos para reestructurar la deuda. Su plan es seguir adquiriendo más activos de energías renovables, principalmente plantas solares, y alcanzar los 500 millones de inversión en siete años.
A marzo de 2022, en Chile había 6.328 MW de instalaciones solares, logrando una penetración del 20% en el sistema