La tercera etapa, que como cada una de las dos anteriores tiene potencia de 31,12 MWp, fue inaugurada recientemente por el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro. Las tres plantas -Coremas I y II entraron en operaciones en 2017- han significado una inversión de 82 millones de dólares.
El proyecto es una inversión conjunta entre la empresa brasileña Rio Alto Energia y la empresa danesa Nordic Power Partners, mientras la parte EPC (iniciales en inglés de ingeniería, contratación y construcción) para el segmento de energía solar, ha sido adjudicado a la firma local WEG, que suministró toda la ingeniería, contratación, suministro de inversores solares centrales, subestación y construcción de centrales eléctricas.
STI Norland tiene su sede central en España, donde fue fundada en 1996, y cuenta con filiales en Brasil, Chile, Estados Unidos, India, Israel, México y Sudáfrica.