Las innovaciones en los productos, una elevada demanda y la constante caída de los costes frente a la subida de los del petróleo, gas y carbón, han convertido a la solar fotovoltaica en la energía estrella en Europa y muchas otras zonas del mundo. Pero también las visibles consecuencias de la crisis climática se reflejan en las ventas. El informe Global Market Outlook de SolarPower Europe deja clara constancia de ello.
En el año 2020, y a pesar de la covid-19, en el mundo se instalaron 138,2 gigavatios (GW) nuevos de potencia fotovoltaica, lo que equivale a un crecimiento del 18 por ciento respecto al año 2019 y supone un nuevo récord mundial anual para el sector: la potencia solar fotovoltaica instalada en todo el mundo llega ya a los 773,2 GW.
Con este crecimiento, el sector fotovoltaico supera el hito de los tres cuartos de teravatio (TW) de potencia instalada y contribuye a mejorar el posicionamiento de la energía del sol: el 39 por ciento de la potencia instalada en el último año entre todas las tecnologías de generación eléctrica corresponde a la energía fotovoltaica. De cada tres unidades de centrales eléctricas instaladas en el año 2020, más de una son fotovoltaicas. Al mismo tiempo, el porcentaje de la energía solar en el total de la electricidad generada creció hasta alrededor del 3,1 por ciento. No obstante, los combustibles fósiles y nucleares todavía siguen generando casi el 70 por ciento.
El club de los gigavatio
China fue el principal motor de crecimiento de la solar fotovoltaica en 2020, impulsando sus conexiones solares a la red en un 60% hasta 48 GW y poniendo en línea cerca de 2,5 veces la capacidad del segundo mayor mercado, Estados Unidos. Pero cada vez hay más países que apuestan por esta tecnología. En 2018, el club de los gigavatios estaba formado por 11 países, en 2020 ya eran 18 y SolarPower Europe pronostica que en 2023 serán 29.
Una de las mayores sorpresas de los dos últimos años ha sido Vietnam, un país que se ha convertido en el tercer mercado solar del mundo en 2020. Dos atractivos planes de incentivos han llevado a que Vientman desarrollara primero, en solo un año, un vibrante mercado a escala de servicios públicos, seguido en 2020 por la creación de un gigantesco mercado de energía solar en tejados, lo que ha hecho que el segmento pasara de ser prácticamente nulo a superar los 9 GW, con 6,9 GW conectados a la red solo en diciembre. Este ejemplo demuestra la rapidez con la que la industria solar puede funcionar si se dan las condiciones adecuadas.
Paneles más caros
El informe recoge también el aumento de los costes para los fabricantes en el primer semestre de 2021. Los precios del silicio se han duplicado con creces en los primeros cinco meses, mientras que el aluminio se apreció casi un tercio y los costes de los materiales de encapsulación aumentaron en dos dígitos. La plata, el consumible más caro de una célula solar además de la oblea, cuesta ahora también bastante más, al igual que el acero y el cobre, utilizados en los sistemas de montaje o en los cables. Sin embargo, el principal factor de coste ha sido el silicio, cuya grave escasez de suministro ha hecho que la principal materia prima de la energía solar duplique aproximadamente su coste en un módulo, añadiendo un 20% a los costes de producción. La consecuencia: los precios de los módulos han cambiado la dirección mantenida durante más de una década a la baja y han subido considerablemente.
No se espera que la situación de escasez de silicio mejore mucho este año. Pese a ello, los autores del informe consideran poco probable que los precios de los módulos sigan subiendo. "De lo contrario -dicen– se retrasarían demasiados proyectos". "Mientras que las licitaciones suelen tener plazos estrictos que obligan a los promotores a terminar a tiempo, el creciente campo de los PPA corporativos no suele ser muy sensible al tiempo; si un proyecto de planta solar no tiene sentido económico, no se construirá", explican.
Mercado Off-grid
El informe también analiza cómo está creciendo el mercado solar sin conexión a red, un campo que cubre el Global Market Outlook 2020 por primera vez, destacando que aunque todavía no se conocen del todo las repercusiones de la pandemia, hay algunos aspectos que si se pueden determinar. Uno de ellos es que la Covid-19 ha provocado que los niveles de instalación previstos para 2020 en este segmento no se hayan cumplido; el segundo, que debido también a la pandemia se ha disparado el deseo de volver a construir mejor y más verde, lo que ha acelerado el desarrollo de programas, incentivos y financiación internacional para la energía solar sin conexión a la red.
Según el escenario de crecimiento medio de SolarPower Europe, este sector mantendrá un crecimiento de dos dígitos hasta 2025, lo que pone de manifiesto la resistencia del sector y su importancia en los esfuerzos de electrificación universal. Muy en especial en el África subsahariana, donde la energía solar sin conexión a la red es especialmente importante dado que, con un 46% en 2019, la región tiene la tasa de acceso a la energía más baja del mundo. En la región hay varios mercados off-grid ya establecidos, como Kenia, Sudáfrica y Tanzania y en otros países también se ha incluido la integración de la energía solar sin conexión a la red en las estrategias nacionales de electrificación.
"Aunque ciertamente es un motivo de celebración que la energía solar siga sorprendiéndonos con mayores cifras de instalación, teniendo en cuenta el hecho de que alrededor del 70% de la energía mundial sigue procediendo de energías contaminantes no renovables y que las emisiones mundiales de dióxido de carbono van a registrar este año su segundo mayor aumento de la historia, la energía solar necesita más apoyo de los responsables políticos", concluyen los autores del informe. "Sólo una mayor ambición y unos marcos políticos adecuados permitirán al sector acelerar el despliegue para aprovechar todo el potencial de la energía solar y cumplir el objetivo del Acuerdo de París".