Dieciocho contra 2.761. "Ya te lo dije", podría espetarle al ministro de Industria, Miguel Sebastián, el sector FV nacional. Porque ciertamente todos los actores de la fotovoltaica made in Spain lo dijeron, alto y claro, hace un año: va a haber un enorme frenazo. Sí, todos expresaron su preocupación y Energías Renovables recogió sus cuitas en un reportaje –titulado "¿Y ahora qué?"– que elaboramos en octubre de 2008 y que repasaba las reacciones de una docena de voces clave de la fotovoltaica española frente al Real Decreto 1578/2008 que viera la luz en el BOE el 26 de septiembre, RD que cumple precisamente un año por estas fechas y que establecía el hoy famoso registro de preasignación de retribución (RPR).
En aquel reportaje recogíamos lo esencial del nuevo RD –reducción de la prima en un 30%, establecimiento de un máximo de megavatios susceptibles de acogerse al nuevo régimen económico (cupo) y RPR– y recogíamos también las reacciones del sector frente a la nueva norma, reacciones que resumimos en una frase: las previsiones son, para empezar –decíamos entonces–, "frenazo ya" y "desempleo a corto plazo". Y así ha sido. Frenazo, explicitado en dos cifras, 30.000 nuevas instalaciones FV en 2008 frente a poco más de doscientas (208) computadas a septiembre de 2009, según la CNE; y desempleo: ya en abril la Asociación de la Industria Fotovoltaica (ASIF) hablaba de "un dramático ajuste que ya ha destruido más de 20.000 empleos" (posteriormente ha elevado esa cifra a 25.000).
El horizonte descrito en aquel reportaje se ha ido materializando, pues, prácticamente al pie de la letra. En aquella edición, la número 72, decíamos, como hemos apuntado antes: las previsiones son "frenazo ya, desempleo a corto plazo"... y estabilidad y crecimiento más suave a medio-largo plazo. Pues bien, según ASIF, las instalaciones fotovoltaicas autorizadas en la primera convocatoria del registro de preasignación de retribución tienen que estar terminadas antes del próximo mes de febrero, mientras que las segundas deben estarlo antes de abril: la cercanía de estas fechas tendría que activar el mercado, según la asociación, de tal manera que en los próximos seis meses deberían haberse creado 10.000 puestos de trabajo.
Los tejados no acaban de despegar
Otras tres previsiones apuntábamos en aquel sumario (foto) que ilustraba el reportaje que titulamos "¿Y ahora qué?". Son estas: "despegue muy lento de las instalaciones sobre cubierta, más exportación y una crisis que no va a afectar a las renovables tanto como a otros sectores". Con respecto a la primera recogimos varias declaraciones cuasi visionarias. He aquí un extracto de lo publicado entonces: «Jochen Beese, director gerente de Krannich, también cree que, con el nuevo RD, “las instalaciones sobre cubierta no han salido muy beneficiadas”. BP Solar coincide grosso modo: “las instalaciones en tejados no se desarrollarán tanto como se esperaba porque la tarifa no es atractiva”. José Manuel de la Iglesia (TAU) insiste en que “posiblemente no todo el cupo del techo se cubra, por lo menos inicialmente". Evidentemente –añade–, "si hay un nicho de mercado, irán apareciendo empresas, pero es posible que ni en el primer ni en el segundo año”, y concluye que “ahora mismo, España no tiene la estructura de acometer tantos tejados como permite la ley”».
Pues bien, ASIF difundía un comunicado el pasado 21 de julio en el que confirmaba las previsiones. Decía así: "la Asociación de la Industria Fotovoltaica (ASIF) denuncia que las barreras administrativas están frenando la incorporación de la energía solar a la edificación". La tramitación de una pequeña instalación de 5 kW sobre un tejado –añadía la nota de la asociación– "sigue siendo idéntica a la de una gran planta en suelo de 10 MW, a pesar de que la Comisión Nacional de la Energía (CNE) ya ha elaborado una propuesta de simplificación de los procedimientos administrativos, de acuerdo con lo establecido por el Real Decreto 1578/2008". ASIF concluía en su comunicado estival: "hasta el momento, no se han cubierto los cupos asignados para la fotovoltaica en la edificación en ninguna de las tres convocatorias de este año, e incluso, en la última convocatoria, ha descendido el volumen de mercado asignado a las instalaciones más pequeñas".
Queda por ver si acabarán confirmándose o no las dos previsiones de largo plazo: "más exportación y una crisis que no va a afectar a las renovables tanto como a otros sectores". De momento, en todo caso, no son pocas las firmas españolas que miran más allende Pirineos que puertas adentro. Sirvan de muestra un par de ejemplos. Eurener, primera empresa de franquicias de España, anunciaba en noviembre de 2008 la apertura de oficina en Italia mientras en julio del corriente abría otra en Portugal. Siliken estimaba hace apenas unos días que en 2009 el 80% de su producción se venderá fuera de España y añadía que, de esta manera, "afronta el cambio regulatorio experimentado en nuestro país".
La previsión también ha sido confirmada durante la III Edición de la Conferencia de la Industria Solar que ha organizado Solarpraxis en Madrid hace apenas unos días. Allí, David Pérez, socio de la consultora eclareon, ha culpado de "la caída del mercado FV 2009" al nuevo sistema de cupos establecido por el Real Decreto 1578/2008 para, acto seguido, concluir que "las empresas españolas han tenido que salir al extranjero para sobrevivir, principalmente a países como Francia, Italia o Estados Unidos, aprovechando así su experiencia, su conocimiento y la posición de liderazgo que hasta hace poco tenían en el sector”.
La Cumbre de Copenhague quiere alumbrar un pacto Kioto 2
¿Y de la crisis, esa que "no va a afectar a las renovables tanto como a otros sectores"? Pues habrá que ver: habrá que ver lo que dice el profeta Obama en diciembre en la Cumbre de Copenhague, donde se dilucidará el porcentaje de reducción de emisiones de CO2 que está dispuesto Occidente a firmar (tanto menos CO2, tanta más energía renovable); habrá que ver en qué queda la famosa Ley de Economía Sostenible y habrá que ver, sobre todo, qué números le coloca el gobierno Zapatero al nuevo Plan de Energías Renovables. Sea como fuere, a día de hoy la CNE tiene registrados como instalados 3.472 MW fotovoltaicos, casi diez veces más que los 371 MW que el Plan de Energías Renovables 2005-2010 tenía como objetivo para el 31 de diciembre del año que viene.
Hace poco más de un mes, el ex director general del Idae Javier García Breva señalaba a Energías Renovables que "según Red Eléctrica de España, en agosto la fotovoltaica cubrió el 4% de la demanda con una potencia instalada equivalente a ocho ciclos combinados, todo un récord mundial que expresa que en España la fotovoltaica ya constituye una parte significativa del sistema eléctrico y que impulsar una industria nacional de fotovoltaica es necesario para cambiar la especialización productiva de nuestra economía y reducir las emisiones de CO2”. El último volantazo regulatorio (el RD 1578) ha traducido los 2.761 megavatios del año pasado en dieciocho. Queda por saber hacia dónde se dirigirán los próximos. En todo caso, Energías Renovables lo seguirá contando.
