El fabricante de aerogeneradores Vestas difundió ayer un comunicado en el que explica el procedimiento que ha seguido para cerrar sus fábricas de Daimiel (Ciudad Real) y Viveiro (Lugo), instalaciones ambas en las que personal de la empresa realizó el lunes “trabajos de transición” para coordinar la parada de la actividad y minimizar el impacto del paro. Según la compañía, todo ello se hizo “en constante comunicación con distintos actores sociales”. Los sindicatos Comisiones Obreras y UGT sin embargo difundieron ayer un comunicado en el que denuncian presiones al comité de empresa de Vestas Daimiel y destacan que "todas las empresas del sector eólico con centros de fabricación en España decidieron ayer [por el lunes] interrumpir sus operaciones y acogerse al permiso retribuido. Todas, menos una" (por Vestas Daimiel). En el comunicado que difudió ayer, la empresa explica que, en seguimiento del Real Decreto 10/2020, ha decidido adoptar las siguientes medidas:
(1) una parada completa de la fábrica de Viveiro a excepción de unos potenciales servicios mínimos de logística;
(2) una parada completa de la producción de palas en la fábrica de Daimiel. “Permanecerán operativos -informa la empresa- servicios mínimos en la sección de segmentos, un componente considerado crítico en la cadena de suministro internacional de la compañía, y cuyo parón total dificultaría de manera desproporcionada su reinicio tras el 9 de abril”. Según Vestas, estos servicios mínimos implican la asistencia a la fábrica de 25 empleados, sobre un total de 1.300 trabajadores.
(3) las medidas extraordinarias de seguridad implementadas desde el inicio de la crisis en ambas fábricas -explica la empresa- continuarán estando vigente durante todo este periodo;
(4) una parada completa a la actividad de instalación y montaje de aerogeneradores, con excepción de aquellas tareas requeridas para obtener una parada segura;
(5) la continuación de los servicios de O&M, entendidos como una actividad crítica para el correcto y seguro suministro de electricidad en el país;
(6) la mayoría de los empleados de oficina continuarán desarrollando su actividad en modo de tele-trabajo.
Viveiro
La fábrica de Viveiro se ha preparado durante el lunes para una parada completa de sus actividades. La fábrica por tanto queda cerrada desde el lunes a las 22.00 horas hasta el próximo domingo, 12 de abril, una vez pasada la Semana Santa. Aquellas personas que ya estaban realizando su trabajo desde casa, continuarán igual que hasta hoy. El resto estará de permiso retribuido recuperable de acuerdo con lo establecido en el Real Decreto 10/2020.
Daimiel
Durante el lunes, 30 de marzo, la fábrica de Daimiel se preparó para realizar una parada controlada de sus actividades, parada que por su naturaleza requiere de muchas horas. En el periodo que va desde el 30 de marzo al 9 de abril, “solamente quedarán activos -informa Vestas- unos servicios mínimos dirigidos a minimizar el impacto desproporcionado en la cadena de suministro de la sección de segmentos”. De los 1,300 trabajadores que hay en la fábrica de Daimiel, solamente se encuentran realizando estos servicios mínimos unos 25 trabajadores por turno repartidos en 4 turnos, lo que representa el 7% del total de los empleados.
“Como en todas nuestras fábricas globalmente -informa Vestas-, desde el inicio de la crisis de COVID19, también en Daimiel se han ido implementado medidas extraordinarias de protección de nuestros empleados: desinfección de áreas de trabajo, distanciamiento personal, uso de EPIs, controles de temperatura. Estas medidas fueron además reforzadas a partir del diálogo abierto con sindicatos hace aproximadamente 10 días. Todas estas medidas continuarán vigentes durante este periodo”.