Concentración de empresas entre los fabricantes de aerogeneradores (OEM, por sus siglas en inglés: original equipment manufacturer), nuevas turbinas con electrónica de potencia y mecanismos de velocidad variable, que permiten adaptar la velocidad de rotación de la turbina a las condiciones el viento. Lo que se traduce en menos esfuerzos en el tren mecánico y máxima producción de energía.
Los cambios en el sector no implican que haya que tirar los viejos aerogeneradores a la basura. Aunque su periodo de garantía haya finalizado, esas máquinas se pueden modernizar, ya sea para operadores que quieren mejorar el rendimiento o para el creciente mercado de aerogeneradores de segunda mano.
Se estima que actualmente hay más de 30.000 turbinas antiguas en el mundo que no tienen electrónica de potencia y que sus periodos de garantía han expirado o están a punto de hacerlo. En esta situación, los operadores tienen dos posibilidades. La primera: repotenciación. Consiste en reemplazar los aerogeneradores existentes, antes de que sus componentes lleguen al final de su vida útil, por otros nuevos, más potentes y fiables, pero también más caros. A lo que hay que sumar el periodo de trámites administrativos, el tiempo de adquisición y la propia instalación.
Reacondicionamiento
La segunda solución a la que los propietarios u operadores pueden acudir es el reacondicionamiento del aerogenerador, que consiste en renovar algunos componentes eléctricos y mecánicos de las turbinas existentes y actualizar el sistema de control del aerogenerador. En los próximos años se oirá hablar mucho de esta opción porque cada día son más las empresas implicadas en esta “puesta al día” de la eólica.
Entre ellas, ABB. El reacondicionamiento que propone desde el Centro de Excelencia de ABB Wind Retrofit consiste en integrar un convertidor de frecuencia dotado de la última tecnología en electrónica de potencia así como la renovación de algunos componentes mecánicos y eléctricos. “En términos generales, el reacondicionamiento persigue el aumento de la productividad así como la prolongación de la vida útil del aerogenerador”, explican desde ABB.
La integración del convertidor permite al aerogenerador trabajar a velocidad variable para adaptar su velocidad a las condiciones del viento tal y como lo hacen los aerogeneradores nuevos. Esto les permite trabajar en el punto de funcionamiento óptimo para obtener la máxima transferencia de energía entre el viento y las palas y suavizar el funcionamiento del tren mecánico. “Además, el coste del reacondicionamiento es netamente inferior al de un aerogenerador nuevo equivalente y su tiempo de instalación es reducido dependiendo de las necesidades del propietario y de las condiciones previas a su puesta al día”.
“Servicios como el de Wind Retrofit de ABB que renuevan los componentes y la tecnología de una turbina existente representan la mejor manera de seguir obteniendo un retorno de la inversión inicial del parque eólico si se dispone de tiempo y recursos económicos limitados”.
El mercado de segunda mano
La repotenciación da lugar a un mercado de segunda mano en el que hay disponibilidad de aerogeneradores antiguos de pequeñas potencias (< 1,5 MW) a precios muy competitivos. Lo que ha generado una demanda creciente. Ahora bien, en la mayoría de casos, los aerogeneradores desmantelados no pueden ser directamente instalados en sus nuevas ubicaciones y requieren también de una puesta a punto.
Por otro lado, los códigos de red eléctrica existentes en cada países no suelen permitir su conexión a la red, a no ser que éste cumpla con los requisitos de dicho código. “Este cumplimiento pasa por el uso de equipos de última tecnología en electrónica de potencia como los convertidores de frecuencia de ABB, gracias a los cuales se puede adaptar la potencia generada e inyectar potencia reactiva para así cumplir el código de red de manera individual y efectiva”, apuntan desde la empresa.
Este mercado de segunda mano resulta especialmente atractivo en países en los que no es posible obtener la inversión necesaria para crear plantas con equipos nuevos. En determinadas ocasiones, el operador pretende beneficiarse de una prima (feed in tariff, FIT) que ofrezca el mejor retorno de la inversión para instalaciones de 200 a 250 kW. Por ejemplo, una FIT para un agricultor en Irlanda podría suponer 300 euros por MWh si produce a 250 kW, pero si incrementa la producción hasta 300 kW entonces la FIT se reduciría a menos de 100 euros por MWh. De ese modo, el reacondicionamiento de turbinas agrega valor, ofrece máquinas asequibles y mejoradas, y proporciona medios para producir electricidad limpia y accesible.
Para atender esta creciente demanda de modernización de turbinas eólicas y dar una solución técnica fiable y eficiente a nivel internacional, ABB creó del Centro de Excelencia de ABB Wind Retrofit en las instalaciones de Sant Quirze del Vallès (Barcelona). Un centro de ingeniería que hace posible darle una nueva vida a las turbinas antiguas.
“ABB es una compañía líder global en tecnologías de automatización y energía que permite a los clientes industriales, de servicios públicos, y de transporte e infraestructura mejorar su eficiencia, mientras reducen el impacto ambiental”. El grupo ABB opera en unos 100 países y emplea alrededor de 135.000 personas.
• Vídeo sobre cómo ABB realiza el reacondicionamiento y la modernización de aerogeneradores.
