Se trata de las centrales eólicas Amistad II, III, IV, listas para entrar en operaciones, pero paradas desde hace dos años por falta de permisos para generación eléctrica de la CRE, según han declarado a Bloomberg Línea tres personas familiarizadas con el asunto.
Las centrales pertenecen a la tercera subasta eléctrica de largo plazo que organizó el Gobierno del expresidente Enrique Peña Nieto, como parte de la apertura del sector mediante su reforma energética, un mecanismo para que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) compre la energía más barata para el suministro básico de sus 44 millones de clientes residenciales.
El presidente Andrés Manuel López y su equipo energético han criticado las tecnologías eólicas y solares por considerar que su intermitencia supone un riego para el Sistema Eléctrico Nacional. Afirman, asimismo, que son caras debido a que requieren respaldo con energías convencionales y, en consecuencia, cancelaron la cuarta subasta durante su tercer mes de Gobierno.
Los proyectos paralizados tienen, conjuntamente una capacidad instalada de 350 megavatios (MW) y se ubican al norte del país, en el estado de Coahuila.
La pandemia de Covid-19 en 2020 provocó el cierre de ventanillas y la suspensión de trámites por parte de las autoridades mexicanas, situación que, según las fuentes, aprovechó la CRE, que preside Leopoldo Melchi, para detener la emisión de permisos y entregarlos de manera discrecional, como ha ocurrido a favor de las empresas estatales Pemex y CFE.
Desde Bloomberg Línea añaden que han consultado a la CRE sobre el tema, pero no han obtenido respuesta. Enel Green Power México opera 1.720 MW en este país, de los cuales 675 son eólicos, 990 solares y 53 hidroeléctricos, con proyectos en Coahuila, Tamaulipas y Guanajuato, Michoacán, Jalisco y Guerrero.