"La industria está preparada para extenderse de forma arrolladora", afirmó Arthouros Zervos, Presidente de GWEC. "La eólica tiene la madurez y fuerza para recortar las emisiones de CO2 de manera contundente y a la vez actuar de colchón contra las oscilaciones en los precios de los combustibles fósiles, además de reducir la dependencia de las importaciones energéticas".
GWEC hizo hincapié en el crecimiento del sector durante 2004, año en que se instalaron 8.154 MW en todo el mundo, un incremento de un 20% sobre la cifra acumulada a finales de 2003. "Los costes de instalar la energía eólica han caído en un 50% durante los últimos 15 años y, según la tendencia actual, esta tecnología será competitiva respecto a los combustibles convencionales dentro de una década", se señala en el comunicado final de Husum. Un aerogenerador moderno puede producir 200 veces más energía que las máquinas de hace dos décadas, según el comunicado. Además, esta fuente energética ya da empleo a 100.000 personas, añade GWEC
La Federación Eólica Alemana (BWE) es aún más optimista. Su presidente, Peter Ahmels, dijo en Husum que la eólica llegará a ser la fuente de generación eléctrica más barata y predice que su precio estará por debajo del de la nuclear para 2015 (sin contar los costes de la nuclear procedentes de la I+D, la seguridad y el desmantelamiento). "La eólica será la primera fuente de energía renovable a cruzar la línea de autosuficiencia económica", procalmó Ahmels.
"La energía eólica es capaz de continuar su trayectoria de éxito durante las próximas dos décadas si se implementan los marcos políticos y reguladores adecuados", indica GWEC. "El éxito alcanzado hasta ahora se debe principalmente a unos pocos países liderados por Alemania, España y Dinamarca. Existen otros 13 países que podrían desempeñar también un papel de liderazgo. Entre estos país figuran Australia, Brasil, Canada, China, EE.UU., Filipinas, Francia, India, Italia, Japón, Polonia, Reino Unido y Turquía.
Mientras tanto, en África, existe un "despertar de conciencia" hacía la eólica, según Hermann Oelsner, de la Asociación Eólica Africana. Las energías renovables son la única solución para plantar cara la enorme escasez de energía y los altos precios de petróleo. "No hay otro camino", dice Oelsner. El país más avanzado de este continente, Suráfrica, se ha fijado la meta de obtener el 4% de su producción energética primaria de fuentes renovables para 2013, con la eólica en primera línea, dijo Oelsner.
Algo parecido a la situación africana pasa en Pakistan, asegura Shahid Hamid, portavoz del gobierno pakistaní en Husum. Hamid anunció que, para mitigar la escasez energética, su gobierno ha aprobado un objetivo de 9.000 MW eólicos para 2013 y que los primeros 100 MW están previstos para 2006. Además, al portavoz dijo que la capital, Islamabad, acaba de aprobar el objetivo de conseguir un 5% de su energía primaria de energías renovables. Hamid recordó que las costas del Océano Indico podrían aportar 40.000 MW eólicos.
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