Más de un millar de expositores procedentes de 30 países mostrarán sus productos en los 65.000 metros cuadrados que ocupa la feria, presidida por una pala de 64,4 metros de Nordex, con un área de barrido de dos campos de futbol y diseñada para una turbina de 3 MW de potencia. La pala ha quedado hoy mismo colocada a las puertas del recinto, depués de haber sido cuidadosamente transportada por las calles de la ciudad alemana durante la noche anterior en un vehiculo especialmente adoptado para ello.
Este importante despliegue da idea de lo que se espera de la WindEnergy Hamburg. Durante cuatro días a partir del martes, el recinto ferial de la norteña ciudad germana será el punto de encuentro de expertos en energía de todo el mundo. El evento cubre toda la cadena de valor de la industria eólica, desde lo último en tecnología –tanto en tierra como en mar– a cualquiera de los servicios asociados. Serán, en total, 18 pabellones, donde las empresas y organizadores podrán informar de sus productos y servicios.
Entre las compañías que acuden a la feria dominan las alemanas y de otros países centro y noreuropeos, pero también hay empresas procedentes de Francia, Italia, España y Portugal, además de China, India, Corea, Canadá o Estados Unidos.
En paralelo a la exhibición, y como es habitual en estos eventos, habrá presentaciones, talleres y mesas redondas, que culminarán el viernes 26 con una jornada centrada en las oportunidades de trabajo que ofrece la energía eólica, las necesidades formativas que exige y cómo planificar la carrera.
La feria, que tendrá caracter bienal, celebra este año su primera edición, con la vocación de convetirse en un nuevo referente de la eólica mundial y como completo de la Husum Wind, punto de encuentro ya veterano de la eólica pero con un enfoque centrado en la industria nacional.