Iberdrola cuenta ahora mismo en Polonia con 163 megas de potencia eólica (en desarrollo y operativos). Además, prácticamente toda la producción de los 163 megavatios terrestres está asociada a contratos bilaterales de compraventa de energía (PPAs) a 10 años. La compañía declara así mismo en el país una cartera eólica marina que se eleva a los 7.300 megavatios, tras la adquisición del 70% del promotor Sea Wind. En este contexto, Iberdrola trabaja en la puesta en marcha del Sea Baltic Hub, un polo renovable en el mar Báltico llamado a actuar como epicentro de servicios offshore y onshore, además de proporcionar contenido local a los proyectos de Iberdrola en el eje Alemania, Polonia y Suecia. El Báltico tiene un "potencial de desarrollo eólico marino" de 93.000 megavatios, de los que 28.000 se ubicarían en aguas polacas.
La cartera eólica marina de Iberdrola asciende a 20.000 megavatios al cierre del primer trimestre del año, asentada sobre estas nuevas plataformas de crecimiento que permitirán al grupo alcanzar una potencia instalada en el mar de 12.000 megas al final de la década. Ya en 2020, la energía eólica marina aportó al Ebitda de Iberdrola 585 millones de euros, tras crecer un 72%; si bien su aportación -estima la compañía- ascenderá hasta los 2.300 millones de euros en 2030.