ScottishPower Renewables, filial de Iberdrola, ha recibido la aprobación del Gobierno escocés para la construcción de una nueva instalación eólica en este país, el parque de Dersalloch, de 69 megavatios (MW) de capacidad. El proyecto, que se ubica junto al municipio de Straiton, al sur de Escocia, y dispondrá de 23 aerogeneradores de última generación, lleva gestionándose desde 2005. De hecho -explica Iberdrola-, se trata de "una de las instalaciones renovables promovidas hasta la fecha por la Compañía que ha tenido que superar más requisitos medioambientales y técnicos".
Impacto visual
Según la multinacional, el proyecto ha sufrido así "diversas modificaciones para ajustarse a las exigencias del Scottish Natural Heritage, de cara a minimizar el impacto visual, y del aeropuerto de Glasgow-Prestwick, para garantizar que el sistema de gestión del tráfico aéreo no se viera afectado por este nuevo parque eólico". Para ello, Iberdrola explica que ha acometido el diseño de este parque "en estrecha colaboración con otras instituciones escocesas, como el Historic Scotland, la Universidad de Leeds, el Gobierno regional o las comunidades locales de South Ayrshire".
Eólica marina, corrientes y olas
La compañía hispano-catarí, que prevé concluir esta obra en 2015, ha instalado ya en Reino Unido alrededor de 1.600 megavatios renovables. Además, prevé poner en marcha en Reino Unido este mismo año su primer parque eólico marino, el de West of Duddon Sands (389 MW). Este proyecto, desarrollado conjuntamente con la firma danesa Dong, se sitúa en el mar de Irlanda y está requiriendo una inversión de 1.600 millones de libras, según los datos hechos públicos por Iberdrola. Además, la compañía trabaja en Escocia en el desarrollo de otras dos tecnologías renovables: la energía de las corrientes, mediante el proyecto de Hammerfest, y la de las olas, a través de la iniciativa Pelamis.