Green Eagle Solutions fue fundada por Alejandro Cabrera (ver entrevista) y Juan Fernández Riejos en 2012. Nació con el objetivo de mejorar la operativa de los parques eólicos, y tras diez años en el sector, la empresa ha conseguido implementar una nueva forma disruptiva de operar los parques. Con el crecimiento exponencial de la potencia instalada en Europa, y la necesidad urgente de integrar en la red más y más energía procedente de recursos renovables, la complejidad de los escenarios operacionales se ha disparado en estos años. Desde los cambios regulatorios por parte del operador del sistema (Red Eléctrica–REE, en el caso de España) para que este sea más robusto y fiable, hasta la monitorización y control de tecnologías con diferentes sistemas y edades. Todo ello deriva en una operación que tiene que hacerse de forma más individualizada y que, por lo tanto, necesita de más dedicación y recursos desde los centros de control.
Pero no solo de la eólica vive Green Eagle Solutions. También trabajan con fotovoltaica, con la que han experimentado un notable crecimiento, sobre todo en sistemas de participación de mercados eléctricos y cumplimiento de nuevas legislaciones. Y para la que han desarrollado una tecnología específica para despachos delegados en entorno cloud.
Equipo de Green Eagle Solutions
Preguntamos a Alejandro Cabrera, CEO de la compañía, por la complejidad de ambas tecnologías. “Sin duda, la eólica es la tecnología más compleja. Trabajamos de forma continua con propietarios y operadores para identificar procesos operacionales susceptibles de ser automatizados y por lo tanto mejorados. A día de hoy, hemos llegado a incrementar la producción de parques en un 1% gracias a la automatización de procesos, sin necesidad de renovar ningún tipo de hardware”, responde.
Robot ARSOS
En esas mejoras ha jugado un papel importante el robot ARSOS. Tras los primeros años desarrollando herramientas y soluciones software para hacer que las operaciones remotas fuesen más eficientes y, sobre todo, escalables, en 2015 se implementó el primer robot ARSOS. Un sistema basado en la automatización robótica de procesos que, gracias a sus algoritmos, es capaz de operar cientos de turbinas a la vez, respondiendo de forma autónoma y en cuestión de segundos ante alarmas y eventos que gestionan desde los centros de control. “Con este sistema los operadores no tienen la necesidad de monitorizar de forma activa todos los eventos de las turbinas, sino focalizar su atención en esas acciones sobre las que el robot no puede actuar y que, por lo tanto, necesitan la atención de la inteligencia humana”, explica Cabrera.
Una vez automatizados los protocolos de actuación, el foco está ahora en la inteligencia artificial de estos robots software. “Actualmente estamos en un proceso de análisis del rendimiento de ARSOS para lograr que el robot software no solo se limite a seguir un proceso de lógica programado sino que, gracias a la aplicación de herramientas de machine learning, pueda en un futuro recomendar mejoras en el protocolo de operación del cliente, minimizando así las paradas de los aerogeneradores y aumentando por lo tanto la disponibilidad de estos”, apunta.
ARSOS no está pensado solo para mejorar las capacidades de gestión de los primeros sistemas de control de parques eólicos, que cuentan con máquinas más antiguas. “Nuestra herramienta fue ideada y desarrollada con el fin de ser utilizada por los operarios de cualquier centro de control de energías renovables. Está diseñada para que los directores de esos centros mejoren sus kpis (Key Performance Indicators, o indicadores claves de actuación), sus tiempos de respuesta, la seguridad, y para ayudar en la estandarización de la operación de activos. Cuanto más grande es el volumen de activos que se operan, más valor podemos aportar”, señala el CEO de Green Eagle Solutions. Que, además, puntualiza: “La utilización de ARSOS Robot no implica reemplazar sistemas de control, está desarrollado para cohabitar con sistemas existentes. También es cierto que nosotros ofrecemos un servicio de centro de control para aquellos propietarios o proveedores de O&M que no dispongan de su propio centro de control o simplemente prefieran delegar la operación en nosotros. En nuestro centro de control utilizamos también la herramienta de ARSOS Robot”.
La utilización de ARSOS Robot no implica reemplazar sistemas de control porque está desarrollado para cohabitar con sistemas existentes
En cuanto a los aerogeneradores de última generación, “ARSOS sigue aportando mucho valor ayudando a operadores con la supervisión y envío de notificaciones inteligentes a las partes involucradas. En cualquier caso, lo que hoy es considerado moderno, deja de serlo en el instante en el que el gobierno o la regulación cambia por parte del operador del sistema eléctrico (REE). “Con nuestro software podemos dar una respuesta rápida sin necesidad de cambiar el software del OEM (Original Equipment Manufacturer, los fabricantes de equipos). Como caso reciente tenemos la implementación del procedimiento 3.11 o SRAP (Sistema de Reducción Automático de Potencia) que implica una reducción de potencia a 0 en sólo 5 segundos. No todas las plantas permiten este funcionamiento, ni siquiera las modernas, y nosotros lo implementamos con ARSOS”.
Centro de control de RWE, un caso de éxito
Uno de los casos de éxito más relevantes en la automatización de operaciones remotas de Green Eagle Solutions, se implementó recientemente para el centro de control de RWE Iberia. La compañía se haría cargo de las operaciones remotas no solo del porfolio español sino también de todos los parques localizados en Italia. El incremento de megavatios a operar es un hecho al que se enfrentan los operarios, un hecho muy positivo para la industria y el tejido empresarial eólico.
Sin embargo, se necesitan nuevos procesos y herramientas que permitan ajustarse a este crecimiento. La ampliación de activos renovables supuso para RWE Iberia un aumento en el número de actuaciones por operador necesarias, además de trabajar con diferentes tecnologías a las que antes no estaban acostumbrados. Por ello, decidieron automatizar principalmente las acciones de arranque y parada de turbinas, notificaciones a operadores de planta y SET points, reduciendo así su tiempo de respuesta de 15 minutos a cuestión de segundos por cada evento o alarma.
Primera ronda de inversión
Green Eagle Solutions no ha parado ni un momento de evolucionar su tecnología. Pero desde un punto de vista empresarial, hasta hace muy poco, la compañía tenía un crecimiento orgánico porque no disponía de recursos suficientes para abrirse a nuevos retos y mercados. Las cosas comenzaron a cambiar el año pasado, cuando obtuvo su primera ronda de inversión liderada por SET Ventures, un fondo holandés especializado en el sector de las renovables, que luego fue seguida de Kibo Ventures, fondo tecnológico español.
A día de hoy, la junta directiva de la compañía está constituida por los dos fundadores, Juan Fernández y Alejandro Cabrera; Anton Arts, managing director de SET Ventures; Juan López, investment director de Kibo Ventures; y Lars Hoffman, presidente de la junta directiva. “En este próximo 2023 –señala Alejandro Cabrera–, esperamos llevar a cabo la segunda ronda de inversión para seguir creciendo y expandiendo Green Eagle Solutions fuera de Europa, de forma mucho más efectiva y diligente”.
• Este artículo está incluido en el número de septiembre de Energías Renovables en papel, que puedes descargar gratis en formato PDF aquí.