Lo ha confirmado el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo: los proyectos eólicos no pagarán avales hasta que comience su construcción; es decir, los avales se formalizarán solo en ese momento. Esto supondrá, según sus cálculos, un ahorro medio de unos 24.000 euros anuales para un parque de 25 MW. Además, los titulares de parques ya autorizados podrán pedir la devolución de los avales siempre que su construcción no haya comenzado todavía.
Feijóo ha anunciado, asimismo, un próximo decreto sobre repotenciación de las instalaciones eólicas, para incentivar la sustitución de las actuales máquinas, a fin de que haya menos pero con más potencia. El presidente gallego explicó que ello repercutiría en una disminución del canon eólico y, al mismo tiempo, reducirá la contaminación paisajística que causan los aerogeneradores. Los parques que acepten la repotenciación podrán incrementar la potencia instalada entre un 10% y un 15% por ciento.
El jefe del Ejecutivo gallego y el conselleiro de Economía e Industria, Francisco Conde explicaron que la reforma de la ley eólica gallega, que data del año 2009, se hace para adaptarse al nuevo marco del sistema energético español, que está condicionado por una instalación "excesiva e improvisada" de la potencia eléctrica y para hacer frente a las deudas del sistema.
De acuerdo con Feijóo, el 66% de la energía que consume actualmente Galicia es generada con fuentes renovables. El presidente del ejecutivo autonómico subrayó que 2013 fue el año de mayor producción en la Comunidad desde que hay registros, un 38% más que en 2012. También puso el acento en la alta eficiencia de los parques gallegos, superior, según dijo, a la media de España.
Por su parte, el conselleiro de Economía señaló que el desarrollo de estas medidas pone de relieve la "renovación de la apuesta” de la Xunta por el sector eólico gallego e insistió en que el Ejecutivo tiene ya en marcha otras iniciativas para otorgar facilidades fiscales, técnicas, administrativas y financieras a los agentes del sector.