Tras analizar las aportaciones recibidas por el Ministerio –entre ellas del Gobierno canario y de organizaciones ecologistas, así como otras instituciones del Estado– la Secretaria de Estado de Medio Ambiente se ha pronunciado favorablemente sobre el parque y el pasado 19 de noviembre fue publicada dicha evaluación en el Boletín Oficial del Estado, informa Europa Press.
El Ministerio considera que no es previsible que el proyecto vaya a producir impactos adversos significativos ya que cumple "los requisitos ambientales exigidos. Esta resolución pone fin a la vía administrativa, si bien se puede interponer recurso de reposición ante la propia Secretaría de Estado en el plazo de un mes, o bien recurso ante la Sala de lo Contencioso-Administrativo de la Audiencia Nacional, en el plazo de dos meses, a partir del día siguiente al de su notificación. “Mar de Canarias” inició su tramitación ante el Ministerio en 2013.
El proyecto
El parque albergará solo dos aerogeneradores, cada uno de 5 MW de potencia pero con diferentes sistemas de palas, a fin de poder comparar la eficiencia y estabilidad de cada máquina. Según la resolución publicada en el BOE, el diámetro máximo del rotor de uno de los aerogeneradores será de 126 metros, mientras que el aerogenerador segundo, en el que se incorporará el sistema de control DBB (que optimiza la potencia eólica extraída en cada momento) partirá de 130 metros en posición de máxima expansión. En el caso de que los resultados experimentales permitan ampliar este parámetro, se podría llegar a un máximo de rotor de 176 metros.
Las torres tendrán un diámetro interior de 5,7 metros, se apoyarán sobre el fondo, a una profundidad de 41 y 49 metros, respectivamente, y estarán ancladas al fondo marino mediante seis haces de acero. Medio Ambiente afirma que de esta forma “no habrá necesidad de realizar perforaciones” para fijar los aerogeneradores. Un cable submarino conectará ambas máquinas entre sí y con la subestación eléctrica, situada en tierra firme. El tendido submarino tendrá una longitud de 3.540 y estará soterrado en la mayor parte de su recorrido.
La intención es que “Mar de Canarias” esté listo para entrar en funcionamiento en un plazo de entre dos, dos años y medio. A partir de ese momento el proyecto operará en fase experimental durante cinco años, que pueden ampliarse hasta 20 años más.
Posibles impactos
El informe de Medio Ambiente indica que durante la fase de explotación los mayores impactos derivan del trasiego de las embarcaciones de mantenimiento del parque. En cuanto a la
cercanía a la Zona de la ZEPA (Zona Especial de Protección para Aves) Juncalillo del Sur, situada en tierra, a tres kilómetros al sur del parque, la Secretaría de Estado considera que "además de encontrarse a una distancia considerable”, hay un núcleo urbano –Castillo de Romeral– de por medio.
De todas formas en el documento ambiental se plantean una serie de medidas encaminadas a minimizar las molestias sobre las poblaciones de aves, así como la ejecución de estudios complementarios, para reconocer las especies más frecuentes en el entorno y el uso de la zona por las mismas, así como identificar las principales zonas de paso de aves migrantes que pudieran verse afectados por los dos aerogeneradores instalados.
Medio Ambiente estima que el tipo de cimentaciones propuestas para el parque y el corto trayecto de la línea de evacuación de energía harán que la ocupación de la superficie marina por la infraestructura sea muy limitada y no cree que vaya a afectar a hábitats de especial interés..
En cuanto a la calidad de las aguas, el Ministerio considera que "la principal amenaza vendría por vertidos derivados de accidentes, tanto de las embarcaciones que trabajen en la construcción del parque y su mantenimiento, como de los propios aerogeneradores", pero que la "elección de equipos de transmisión directa, es decir sin caja multiplicadora, permite reducir el aceite que alberga el aerogenerador, y por tanto, el riesgo de contaminación de las aguas".
Otro aspecto que se ha tenido en cuenta es el impacto que pueden provocar los campos electromagnéticos ligados al cable de evacuación de la energía en el comportamiento de algunas especies marinas, en especial peces. Para minimizarlo, explica Medio Ambiente, “se utilizarán los sistemas de cableado que menores campos generan". Por último, para evitar daños en la pesca, el promotor se compromete a evitar las actividades que puedan afectar a los recursos pesqueros de la zona, así como, en la medida de lo posible, a aprovechar el tejido empresarial local en el proceso de construcción y de control del parque (mano de obra, embarcaciones, servicios, etc.).
El informe de la Secretaría de Estado de Medio Ambiente se puede consultar pinchando aquí.