Global Wind Energy Council (GWEC) prevé sean instalados a lo largo del presente curso (2014) al menos 47.000 MW de nueva potencia eólica (en 2013, y según datos de la Asociación Mundial de la Energía Eólica, el mundo añadió a su parque eólico global 36.254 megas, lo que sitúa la Previsión 2014 muy por encima del Registro 2013). GWEC señala, entre otras cosas, que China encabezará este año la carrera eólica, si bien el mercado estadounidense mostrará una "fuerte recuperación", y los de Canadá y Brasil batirán todas sus marcas precedentes. Este último Annual Market Update prevé además "centenares de megavatios en Suráfrica", nación que completaría el quinteto top de la Eólica 2014. En 2013, los cinco mercados más dinámicos del mundo han sido los de China, que ha añadido más de 16.000 megas a su parque eólico nacional (hasta situarlo por encima de los 91.000 MW), Alemania (3.238 megas instalados), Reino Unido (1.883), India (1.729) y Canadá (1.599).
En 2018, habrá 600.000 megavatios eólicos instalados en todo el mundo
En lo que se refiere estrictamente a las previsiones, el secretario general del Consejo Global, Steve Sawyer, ha señalado que las economías emergentes van a desempeñar "un rol creciente en el mercado global", lo que, unido al previsible vigor de la eólica china y a la recuperación en Estados Unidos, se traducirá en la cuasi duplicación de la potencia eólica instalada en los próximos cinco años. Así, en 2018, y según las previsiones del GWEC, el mundo rondará los 600.000 MW eólicos instalados. La distribución de esa potencia sería tal y como sigue: 120 gigas en Asia; alrededor de 68 GW en Europa; 61 gigavatios en el norte de América (la incertidumbre regulatoria que se avecina, sobre todo en Estados Unidos, convierte esta en "la parte más difícil de este pronóstico", según el GWEC); 14 GW en Latinoamérica (si bien solo una nación, Brasil, podría alcanzar esta cifra si se materializan sus planes gubernamentales); África y Oriente Medio, 13 gigas; y la región del Pacífico, cinco gigas (5.000 megavatios, MW).
Incertidumbre en España, buenas previsiones en Latinoamérica
El informe se detiene poco en España: "The future of the Spanish wind market at present is very uncertain" (el futuro del mercado eólico español es muy incierto en la actualidad). Mejores son las expectativas, como se ha visto, en Latinoamérica. Según este Market Update del GWEC, "la energía eólica está alcanzando masa crítica en un cierto número de mercados de la región (...). En el medio-largo plazo -explica el informe-, la demanda de seguridad energética y de diversidad de fuentes de suministro animará el despliegue de la energía eólica en Latinoamérica". La industria eólica y su cadena de suministro "están firmemente establecidas en Brasil" y las perspectivas inmediatas para el mercado eólico brasileño son "prometedoras" (en 2014, Brasil añadirá, según el GWEC, 4.000 MW a su parque eólico nacional). Chile podría sumar 1.850 MW en el quinquenio todo (450 de ellos está previsto sean conectados en 2014) y le seguirían algo a la zaga Argentina (2.000 MW en fase casi germinal de promoción) y Uruguay (otros 350).
La clave, la política de cambio climático
La previsión global del GWEC, en todo caso, parece optimista, pues duplicar la potencia instalada en solo cinco años no es precisamente un crecimiento flaco. El Consejo se muestra no obstante cauto: "sin una política climática global fuerte, el crecimiento del mercado probablemente no volverá a presentar tasas del 20 ó del 25%, como las registradas durante las dos últimas décadas". Para que la industria eólica pueda desarrollar todo su potencial -insiste Sawyer-, "es esencial que los gobiernos se tomen muy en serio, y pronto, el cambio climático". En resumen, el informe anual del Global Wind Energy Council hace un fotografía de la situación eólica presente en más de ochenta países, 24 de los cuales ya cuentan con más de mil megavatios eólicos instalados, y señala las tendencias para el quinquenio 2014-2018.
LCOE+
Además, el documento plantea el concepto de Costes Sociales de Generación de Electricidad, concepto que propone Siemens en lugar del Levelized Cost of Energy, coste medio de generación de electricidad. El jefe de Tecnología de la división eólica de Siemens Energy, Henrik Stiesdal, justifica esta propuesta alternativa: "en nuestra opinión -dice Stiesdal- el concepto Levelized Cost of Electricity (LCOE) no refleja el verdadero coste-beneficio de las diversas tecnologías en una escala macroeconómica". Así, Siemens añade a los factores tenidos en cuenta por el LCOE (costes de capital y operación, combustibles y emisiones) algunos otros (subsidios, redes...) que recogerían con más precisión el verdadero coste de la generación de electricidad, según la multinacional alemana. A ese nuevo concepto le llama LCOE+ ó LCOE expandido.
SCoE
Sin embargo -añade Siemens-, el modelo LCOE+ tampoco es capaz de reflejar todos los costes de la generación de la electricidad, por lo que la compañía ha desarrollado un tercer modelo -Society's Cost of Electricity, SCoE- que incluye "costes sociales" (como la sequía, que puede afectar gravemente a instalaciones de generación de electricidad que necesitan de mucha agua para producir, como las centrales nucleares o las térmicas de carbón); "impactos económicos" (como la creación de empleo a escala local, o el crecimiento del consumo que se deriva de una mayor tasa de empleo entre la población local); e "impactos geopolíticos" (la energía eólica -explica Stiesdal- funciona como una especie de seguro contra la volatilidad de los precios de los combustibles fósiles, volatilidad muchas veces no tanto intrínseca, cuando debida a factores exógenos -políticos-, "incluso guerras").
Dentro de diez años, según las estimaciones de hoy
Así las cosas -concluye Siemens-, la energía eólica sería la más barata de todas (el coste de generar electricidad en parques eólicos sería el más bajo de todos los costes) en el año 2025 en el Reino Unido (el parque marino británico es, con mucha diferencia, el más importante del mundo a día de hoy, con 3.681 MW). El caso es que Siemens asegura que, en 2025, en el Reino Unido la tecnología más barata para generar electricidad será la eólica terrestre, en primer lugar; y la marina, en segundo. El gráfico que aparece bajo estas líneas es muy explícito. En el año 2025, en Reino Unido, generar electricidad con el viento marino saldrá a 60 euros el megavatio hora, mientras que hacerlo con uranio (energía nuclear), gas (centrales térmicas de ciclo combinado) o carbón rondará los 100. Dentro de diez años, incluso la fotovoltaica, según Siemens, será más barata (mucho más) que el gas.