El parque eólico Quixaba (25 MW) es el primero de los ocho parques que forman parte del complejo denominado Ceará II. El proyecto fue financiado por la Caixa Económica Federal con recursos del Banco Nacional do Desenvolvimento, según informa Impsa. El parque ocupa una superficie de 57 hectáreas y está equipado con diecisiete aerogeneradores brasileños de 1,5 MW fabricados por Impsa en el estado de Pernambuco (Brasil). Los equipos presentan conversores de frecuencia e imanes permanentes, de los cuales hay más de 11.000 MW en operación comercial en el mundo.
Según la información facilitada por la compañía argentina, "la construcción de este parque generó 2.000 puestos de trabajo de modo directo e indirecto". Impsa prevé que la nueva instalación eólica agregará anualmente a la red eléctrica 80.000 MWh, "suficiente como para alimentar con energía limpia y renovable el consumo eléctrico de alrededor de 40.000 familias y a su vez evitará la emisión de 650.000 toneladas de dióxido de carbono a la atmósfera, que equivalen al ahorro del consumo de 1,3 millones de barriles de petróleo o a plantar quince millones de arboles durante diez años".
Según el vicepresidente de Impsa Energy, Juan Carlos Fernández, "el objetivo de la compañía es invertir en energías renovables aportando al crecimiento y diversificación de la matriz energética de Brasil; por eso, estamos al día para alcanzar en Brasil una inversión de R$ 5.000 millones hasta el 2014. Y somos conscientes de la importancia de apoyar este crecimiento mediante la utilización de máquinas y productos brasileños para así permitir el desarrollo tecnológico de la energía eólica en el país”. Energimp pasa por ser uno de los mayores generadores eólicos de Brasil, donde posee actualmente 30 parques eólicos.