El proyecto, que comenzó en el año 2011, y continúa teniendo un gran éxito y una respuesta cada vez mayor de participación de las empresas y particulares, está consolidando su doble vertiente: por un lado, ayudar a niños menores de 18 años que necesiten un tratamiento u aparatos ortopédicos no cubiertos por la sanidad pública; y por otro, dar una nueva vida a los tapones de plástico mediante su reciclaje.
En la Fundación SEUR se ha formado un comité que examina los expedientes de los niños solicitantes, cuya documentación se custodia con la máxima confidencialidad. Revisada por un médico, el comité acepta los casos, que son atendidos por orden de fecha de llegada.
Con el proyecto “Tapones para una nueva vida”® se ha conseguido ayudar a 177 niños y niñas, entregar cerca de 1.200.000 € para ayudar a financiar tratamientos médicos y ortopedias y reciclar hasta el momento 6.542 toneladas de tapones de plástico, evitando la emisión de 8.198 toneladas de CO2.
La participación de Bornay en el proyecto, en marcha desde el pasado jueves 18 de marzo, ha tenido una gran acogida por parte de los vecinos de la localidad en la que se ubica la empresa (Castalla, Alicante), que estaban deseando que alguna empresa o administración colocara estos contenedores.