Fernández ha realizado estas declaraciones en la clausura de la jornada Oportunidades y retos de la eólica marina en Asturias, organizada por Compromiso Asturias XXI y la Fundación Foro Jovellanos, que ha reunido en Gijón a expertos, agentes sociales y económicos, operadores energéticos y empresas autonómicas de la cadena de valor de la eólica en tierra (onshore) y en alta mar (offshore). Durante su intervención y en un mensaje directo al sector pesquero, presente en la jornada a través de la Federación de Cofradías de Pescadores, el consejero ha admitido que la eólica marina puede generar “temores e incluso rechazo” en la etapa de planificación, como ocurrió en su momento en países como Escocia. “Pero con diálogo y buscando la compatibilidad de espacios, tramitaciones garantistas y ágiles”, esos recelos -ha dicho- pueden minorarse de manera sustancial.
El Gobierno de Asturias ha anunciado además que ya ha trasladado al Ministerio para la Transición Ecológica una propuesta de zonificación limitada para la energía eólica marítima. El objetivo del Principado es contar en la comunidad con 0,7 gigavatios (GW) de potencia eólica marina instalada, en los próximos años (que podrían quedar distribuidos en una cincuentena de aerogeneradores marinos) y en dos áreas limitadas: frente a Gijón y en la costa occidental. El titular de Industria ha precisado que se trata “de zonas de usos permitidos, donde se podría plantear eólica marina, lo que no quiere decir que necesariamente se vaya a implantar”.
El consejero de Industria, Empleo y Promoción Económica de Asturias ha defendido la prudencia de su Gobierno para la creación de parques eólicos frente a otros territorios como Escocia, que cuenta con cerca de 20 GW instalados o a punto de entrar en servicio, a los que se sumarán las 15 áreas subastadas a principios de año sobre 8.600 kilómetros cuadrados de espacio marítimo, con una previsión de 42 GW instalados en 2035.
El consejero ha enumerado seis razones para la instalación de parques eólicos marinos en Asturias
• Contribuir a lograr los objetivos fijados en el proceso de transición energética.
• Mantener la seguridad y calidad del suministro y compensar los cierres de las térmicas.
• Sin carbón, el único recurso energético abundante en Asturias es el viento.
• Por el incremento previsto de la actividad económica, considerando no sólo el sector energético.
• Por la generación neta de empleo, de cara a compensar los efectivos perdidos por el desmantelamiento de la cadena regional del carbón.
• Porque ofrece a las empresas asturianas una oportunidad para acceder o consolidarse en un mercado con enorme potencial de desarrollo en los próximos años.
Hasta ahora, Industria ha identificado unas 35 empresas con intereses en esta actividad, que dan empleo a 3.200 personas. Estos datos -informa el Principado- no incluyen a ArcelorMittal ni los proyectos ya anunciados para la implantación de centros de fabricación de componentes. “Por todos estos motivos, la eólica marina está entre nuestras prioridades y en la planificación energética regional”, ha asegurado Fernández, quien ha indicado que esta actividad podría generar 1.500 empleos adicionales en los próximos años.
A juicio del consejero, los proyectos de parques eólicos marinos “contribuyen al desarrollo de las energías renovables y de las cadenas de valor más sostenibles en una innegable oportunidad de futuro para las empresas”, al tiempo que ayudarán “a lograr los objetivos de una transición justa en una Asturias que debe ser paraíso natural y paraíso industrial”.
Finalmente, ha apelado a las empresas asturianas a colaborar en el desarrollo de proyectos industriales vinculados a la cadena de valor de la eólica marina con el objetivo de conformar en Asturias un “hub de desarrollo eólico”.