Entrevista publicada en el número 82 de Energías Renovables en papel (octubre de 2009). Autor: Antonio Barrero
¿Qué representatividad tiene Avebiom?
Esa es una buena pregunta. Es difícil contestar. Por la complejidad misma del sector. Te diré que, del sector de las calderas domésticas e industriales debemos tener una cuota de representatividad de aproximadamente el 70%. De fabricantes de pellets, en torno al 50. De biogás, alrededor del 50 también.
¿Cuál es el balance de este lustro de trabajo?
Pues muy positivo, porque hemos conseguido que haya conciencia de sector y eso es muy importante para conseguir avanzar con fuerza y de forma continuada.
Castilla y León es la comunidad con más superficie forestal de España. Este verano ha sido uno de los peores de la última década en materia de incendios forestales. ¿Qué propone Avebiom?
Ya hace tiempo que venimos diciendo que el aprovechamiento energético de la biomasa forestal es sin lugar a dudas una gran herramienta para rebajar la cantidad de incendios y sobre todo la virulencia de los mismos, pues si los montes están en producción, limpios y con las cortas al día, seguro que los incendios son menos y, como digo, de menor intensidad. Ahora bien, tenemos que tener claro que, para que la biomasa forestal se mueva, tiene que haber plantas que la consuman, y esto hoy no ocurre. Hay muy pocas plantas que consumen biomasa forestal y eso es así porque la prima que se atribuye al kilovatio generado con este recurso no se remunera convenientemente, por lo que no hay dinero para pagar de forma adecuada a los proveedores de la biomasa forestal y los números no le salen a los inversores. Por lo tanto, hace falta un retoque al alza en las primas atribuidas a la generación eléctrica con biomasa, para que la actividad sea rentable para toda la cadena de valor.
¿Y cuánto debería crecer la prima?
Entre el 15 y el 20%.
En el marco de Expobioenergía se ha programado una ponencia titulada “Proyecto Avebiom para la localización y desarrollo de los nuevos nichos de mercado para la biomasa térmica”. ¿En qué consiste ese proyecto?
Estamos trabajando en la búsqueda de nuevos consumidores de biomasa con fines térmicos, pues hay muchos potenciales consumidores que no saben lo que se puede hacer con la biomasa.
¿Y de qué nichos de mercado estamos hablando?
Hablo del sector agroalimentario, que es en muchos casos un consumidor intensivo de energía térmica y que, además, tiene facilidad de sustitución. Hablamos de fábricas de galletas, de fábricas de pasta... Y hablamos también de industrias agrarias, de secaderos de cereales, de deshidratadoras de forrajes, que también son consumidores intensivos de energía. Y te puedo decir que ya hemos conseguido algunos éxitos. En concreto hay una planta muy interesante en Burgos. Se trata de una planta de deshidratación, molienda y granulación de forrajes. Ya sabes que las deshidratadoras de forrajes trabajan desde abril o mayo a octubre aproximadamente. Pues bien, esta planta, que fabrica pellets de forraje para su empleo como pienso animal, aprovecha su maquinaria durante los meses en que no hace pellets con el forraje para fabricar pellets para calderas, que fabrica con serrín de madera. Y todo el proceso térmico de la planta lo hacen con biomasa, claro. Ese es un nicho muy interesante, pues ahora mismo el 95% del sector funciona con gasoil o con gas. También queremos abrir mercado en los mataderos, en las fábricas de conservas. Y hay un nicho importantísimo: el de los colegios. En España, solo en colegios privados hay unos 2.000, y es sencillamente increíble su consumo. Hemos visto consumos de 20.000, 30.000 euros mensuales. Y de más. Y yo te digo que podrían ahorrarse con biomasa entre el 30 y 45%. Les hemos enviado un cuestionario, ya estamos recibiendo las respuestas y en cuanto tengamos todo el material, sacaremos un estudio. De momento lo que hemos visto es muchísimo interés.
¿Por qué el gas natural le está ganando la batalla a la biomasa?
El desarrollo de las redes de gas natural es sin duda un argumento de peso, pues llegan a todos los lugares y además están llevando a cabo campañas comerciales muy agresivas, regalando las instalaciones o financiándolas a largo plazo. Eso, unido a la predisposición de los técnicos a recomendar el gas natural, por desconocimiento de las posibilidades de la biomasa, está llevando a que su utilización se esté desarrollando con muchísima intensidad. Ahora bien, poco a poco vamos ganando posiciones. Cada vez somos más conocidos y los técnicos son cada vez más conscientes de que la biomasa resuelve las necesidades energéticas de las viviendas con mucha más seguridad, con el mismo confort y con mucho menos dinero en la factura del combustible.
¿En qué medida está afectando la crisis al sector?
Yo creo que en general la crisis no está penalizando muy fuerte a nuestro sector, salvo en el tema de financiación de grandes proyectos, que en estos momentos se encuentran con dificultades para obtener fondos, como muchos otros sectores; por lo demás, la instalación de calderas sigue creciendo a buen ritmo.
¿Qué le pediría el presidente de Avebiom al gobierno?
Ya hace unos meses que le envié una larga carta al presidente del gobierno. Una carta en la que, en síntesis, le pedía una apuesta clara por la bioenergía como herramienta para rebajar la sangría de divisas que supone la gran dependencia energética del exterior, también para generar nuevos puestos de trabajo en las zonas rurales. Le pedí que trabaje porque la política de renovables se convierta en política de estado, no de partido, y que procuren que haya continuidad y estabilidad en la legislación. En fin, le pedí que de una vez por todas vean la bioenergía como una oportunidad, que lo es, y apuesten por ella con decisión y contundencia. Acabamos de recibir la respuesta de Moncloa y básicamente dicen que entienden lo que decimos y que están trabajando por desarrollar el sector de las renovables, pero que no quieren un desarrollo descontrolado. En fin, da la sensación de que es más de lo mismo.
¿Qué espera el presidente de Expobioenería de esta cuarta edición de la feria?
El hecho de que tengamos la feria llena, sin un solo hueco, en una época de crisis aguda a todos los niveles, es una gran satisfacción. Lo que espero es que el nivel de negocio siga creciendo.
El gobierno acaba de aprobar para el ejercicio 2009 el reparto, entre las comunidades autónomas, de casi cuarenta millones de euros “para la protección y mejora del medio natural”. De ellos, ha destinado once millones de euros al aprovechamiento de la biomasa forestal residual. ¿Eso es mucho, poco, lo suficiente?
Muy poco. Pero, seamos sinceros, hay que poner las cosas en su justa medida. Hay una capacidad de suministro importante, pero no tenemos puntos de consumo. Necesitamos diez o doce plantas de diez megavatios para que el sector pueda movilizar en torno a un millón de toneladas de combustible. Eso lo movilizaría todo y daría una alternativa. Es un poco lo de siempre, lo del huevo y la gallina. Y lo que hace falta en realidad es montar el gallinero.